Víctima de las redes sociales

Las redes sociales son un arma de doble filo. En ocasiones lo publicado en Facebook y Twitter -donde todo queda reflejado- se puede volver en contra. En más de una ocasión, comentarios fuera de tono han derivado en disculpas públicas e incluso en dimisiones, sobre todo cuando quien los hace ostenta un cargo público.

En los últimos días, el concejal de Podem Guanyar

Museros

, Rafael Bazán, ha enfurecido a los usuarios de Facebook con un comentario despectivo sobre tradiciones tan arraigadas en estas tierras como los Reyes Magos o Papa Noel.

Los expertos recomiendan "contar hasta diez" antes de publicar una entrada o responder a un comentario en las redes sociales. Algo que parece ser no hizo el edil de Museros antes de darle al botón de enviar a una encendida felicitación navideña que rezaba: "La gente llama sacrilegios e insultos a la tradición a todo aquello que no se ciñe a las costumbres católico-franquistas que nos impusieron hace 80 años. Los reyes no existen, papa noel tampoco, los santos no hacían milagros, los curas pederastas sí existen, el machismo en la iglesia sí existe, dejad de contarles idioteces a vuestros hijos o terminarán por convertirse en idiotas. A la mierda los reyes magos, el papa noel y la puta madre que los parió. Feliz navidad a todos". Aunque el propio concejal retiró el comentario poco después, las palabras no se las llevó el viento sino el Partido Popular de Museros que publicó en su muro de Facebook un pantallazo con el comentario -eliminado- de Rafael Bazán.

Al calibrar las consecuencias de sus palabras y conocer por la red social la reacción de los usuarios, la mayoría vecinos de la localidad a través de la página 'Museros Pocs i Punyeteros', Bazán pidió disculpas y presentó su dimisión como concejal del Consistorio de Museros. En otra entrada en la misma red social, Bazán manifestó que "este suceso me ha hecho reflexionar y entender, dolorosamente, que para ser representante público se necesita estar más cerca de la gente, respetar y convivir con sus tradiciones y sensibilidades".

Del mismo modo, el gobierno de Museros se desmarcó de estas afirmaciones y reclamó respeto para todas las creencias porque "ni el insulto ni las manifestaciones ofensivas respecto a cualquier colectivo o institución pueden tener cabida en el contexto democrático, menos aún si quien las manifiesta ostenta un cargo público y es miembro de una corporación municipal", dijeron. Algo que también se hizo desde la formación política a la que pertenece el edil, quienes reconocían "el tremendo error" de las declaraciones y defendían que "el respeto a todas las personas y a sus creencias debe ser un valor ineludible en una sociedad sana".

Formación
Para Juan Antonio Galindo Torres, Director de Tecnología Factory Web (www.jagalindo.es), el problema radica en que, actualmente, "están accediendo a cargos públicos muchas personas que apenas han tenido experiencia en trabajos públicos, que no han llevado comunicación externa, que no han trabajado en equipo y otras muchas facetas a nivel directivo. Este grupo de personas no disponen de la formación necesaria para gestionar un cargo público y van aprendiendo sobre la marcha y, esto mismo que les ocurre en roles directivos, les ocurre en las redes, que son un reflejo de nuestra actividad real, y, al no controlar todas estas áreas, cometen errores como el del concejal de Museros".
Galindo, que imparte los cursos de Community Manager de la Universidad Politécnica de Valencia, recomienda a los cargos públicos "formarse en áreas de Gestión de Redes Sociales, pero también en áreas como habilidades directivas, dirección de equipos, comunicación, oratoria, etc...". "Los cargos públicos -añade- son directivos de las 'cosas públicas' y tienen que tener esa formación o experiencia para gestionar bien sus puestos".
Galindo sostiene que "los políticos con experiencia y formación sí hacen un buen uso de las redes sociales". Remarca que "hasta ahora, los políticos del gobierno o de instituciones importantes incluso han recurrido a equipos de personas para gestionar sus perfiles de redes sociales, esto para cargos pequeños no es necesario, porque además no se dispone de presupuesto para ello, por lo que en estos casos concretos sí es recomendable y necesaria la formación". "Ha habido meteduras de pata y las seguirá habiendo, pero es importante minimizar los riesgos", concluye.