Alberto García. ¡Hablémoslo! Pero hablémoslo sin discriminar, queriendo unir fuerzas en torno a la lengua, queriendo ser cuantos más mejor sin importar las ideas políticas sino YENDO TODOS en un mismo sentido, el de tener el mismo derecho y las mismas oportunidades. Tenemos que tener el derecho a poder usar la lengua oficial del estado, sin que con esto se tenga que desmerecer que la región pueda hacer uso de otras lenguas. Pero nunca discriminar una frente a otra. La lengua regional tiene que ser un mérito y no un requisito, y sobre todo en zonas castellanohablantes se tiene que respetar nuestro derecho a que prevalezca nuestra lengua materna. Somos de la Valencia castellana. Orgullosos de pertenecer a la Comunidad Valenciana, pero recordando siempre nuestra historia y raíces castellanas.
El Partido Popular siempre está en la defensa de la libertad lingüística, y no va a dejar de estarlo. Nadie va a conseguir engañar a nuestros ciudadanos, intentando confundir sobre la postura que en defensa de la lengua se ha hecho por parte del PPCV en Las Cortes Valencianas. Todo lo que se ha trabajado para oponerse al modelo de los Països Catalans se intenta llevar a cabo por el gobierno del Botánico. En todos los recursos para frenar los “decretazos” de Marzà, ahí ha estado el Partido Popular, poniendo incluso a día de hoy sus servicios jurídicos a disposición de las familias.
El otro día me encontré con la sorpresa de que tras haber estado apoyando las manifestaciones en defensa del castellano, se utilizaban estas manifestaciones para atacar al Partido Popular, para dar a entender que no se conocía sí existía su apoyo... Considerando que cuando se trabaja tanto en esa línea de defensa de la libertad de lengua, y se asiste a este tipo de concentraciones, quizás sea difícil que quede más evidente.
Dejémonos de atacar o de insinuar lo que no es y pongámonos a trabajar duro por el verdadero fin que es la defensa del castellano. Y para ello cuantos más mejor. Así que el PP por su parte no va a dejar de trabajar cómo se ha hecho hasta ahora en la defensa de la libertad lingüística. Le pese a quien le pese.
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