Hay que llamar al 112 si vemos una tortuga en la playa. Tradicionalmente, el Mediterráneo occidental ha sido considerado como zona de alimentación para tortugas procedentes tanto del Mediterráneo oriental como de playas del Atlántico. Desde 2001 las noticias sobre anidamientos en nuestras playas han ido creciendo, sobretodo, de ejemplares de la tortuga boba. ¿Pero viene por gusto o por supervivencia? ¿Cómo podemos ayudarlas? Jesús Tomás, de la Unidad de Zoología Marina del Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biología Evolutiva de la Universitat de València nos descubre sus secretos.
¿Qué tipos de tortugas viven en el Mediterráneo?
En el mar Mediterráneo habitan de forma habitual 3 de las 7 especies de tortugas marinas que existen en el mundo, aunque en aguas valencianas se han registrado ejemplares de 5 de estas especies. De todas ellas, solo dos, la tortuga verde (Chelonia mydas) y la tortuga boba (Caretta caretta) tienen playas de puesta en el Mediterráneo, y principalmente en el Mediterráneo oriental.
¿Por qué vienen a poner huevos ahora?
Es posible que en el pasado hubiera más eventos de los detectados. En la actualidad hay mucha más gente viviendo cerca de costa, el turismo hace que en verano las playas estén llenas de gente, incluso por las noches, y, además, somos más los investigadores que trabajamos en estudio y conservación de tortugas marinas. Hace dos décadas no éramos ni la décima parte. Todo esto hace que los eventos sean más fácilmente detectables. Sin embargo, hemos participado en estudios genéticos, liderados por la Universidad de Barcelona, sobre los nidos puestos en el Mediterráneo español y de las tortugas nidificantes para determinar su origen. Para nuestra sorpresa, hay una importante contribución de tortugas de origen atlántico, y muchas de estas tortugas son de pequeño tamaño, por lo que muy probablemente sean neófitas, es decir, primerizas. Todo esto nos lleva a concluir que es posible que estemos frente a un fenómeno de nueva colonización, con tortugas de origen atlántico colonizando nuevas zonas de puesta en el Mediterráneo occidental. Este fenómeno vendría facilitado por el cambio climático. Al aumentar la temperatura del mar, los huevos podrían madurar dentro de las tortugas en nuestras aguas, cosa que hace unas décadas parecía imposible.
¿A qué amenazas se enfrentan las tortugas?
En nuestras aguas ya veníamos detectando amenazas importantes para las tortugas, como la interacción con pesquerías o la ingesta de plásticos. Pero al tener tortugas visitando nuestras playas nos enfrentamos a nuevas amenazas que tenemos que controlar. En primer lugar tenemos la alta visitación de las playas. La temporada de puesta coincide en los meses de verano con la temporada alta de turismo. Esto hace que las playas estén muy visitadas, afectando a cualquier puesta de huevos que se deje en la playa. No solo las sombrillas son una amenaza potencial, la arena pisoteada queda compactada e impide a las tortuguitas que nazcan escalar hasta la superficie. Además, hay que tener en cuenta que la mayoría de nuestras playas se limpian con maquinaria pesada. La urbanización y la iluminación artificial, de paseos marítimos, apartamentos, discotecas y bares, también supone una amenaza, desorientando tanto a hembras nidificantes como a los neonatos, que pueden morir de agotamiento al ser atraídos por la luz en lugar de seguir su curso natural hacia el mar.
¿Qué hay que hacer si vemos una tortuga o tortuguitas en la playa?
Lo principal es llamar al teléfono de emergencias 112 de protección civil. Automáticamente se activa el operativo coordinado por la Unidad de Zoología Marina de la Universidad de Valencia. De hecho, hemos desarrollado este operativo aprovechando la red de atención a varamientos de cetáceos y tortugas marinas que existe en la Comunidad Valenciana desde finales de los años 80 del siglo pasado. En este operativo participan además otras instituciones como la Conselleria de Medio Ambiente de la Generalitat Valenciana, la Fundación Oceanogràfic, la ONG Xaloc y compañeros de la Universidad Politécnica de Valencia. Una vez activado el operativo valoraremos las acciones a realizar.
Tras dar el aviso no hay que acercarse a la tortuga, hay que mantener la distancia y nunca ponerse en su camino; evitar que otras personas se acerquen y evitar hacer fotos con flash o iluminarla con linternas. También es necesario avisar a las autoridades, policía local o Guardia Civil-Seprona para que establezcan un perímetro alrededor del animal hasta que los especialistas lleguemos al lugar. Pero insisto, lo fundamental es dar el aviso al teléfono de emergencias 112.
¿Qué acciones realizáis los especialistas?
Lo primero es comprobar si la tortuga ha puesto huevos. En ese caso valoraremos si es posible dejar el nido en la playa. Por culpa de la iluminación y las actividades humanas en la mayoría de las playas, es poco viable dejar los huevos en la playa de puesta. El operativo consiste en la translocación de los huevos a una playa de reserva en Valencia, para u incubación en zona protegida.
La ONG valenciana Xaloc-Hermanos de Sal colabora en la protección de los huevos y en diferentes tareas de sensibilización relacionadas con estos eventos, como charlas, seminarios, etc.
También se incuban algunos huevos en incubadora a modo de seguro frente a eventos climáticos que puedan afectar al nido puesto en playa. Una vez nacidos los neonatos valoramos cuántos animales se van a mantener en cautividad durante un año para liberarlos con un tamaño suficiente que les permita hacer frente a los depredadores y aumentar su probabilidad de supervivencia.
También, si tenemos suerte de encontrar a la tortuga aun en playa, estamos realizando marcaje con transmisores satelitales, con compañeros de la UPV, para seguir a las hembras nidificantes, detectar posibles nuevas puestas y ver dónde van a alimentarse una vez terminada la temporada de puesta.
¿Qué otros estudios realizáis en la Universidad de Valencia en relación a las tortugas?
La Unidad de Zoología Marina viene participando en proyectos nacionales y europeos sobre conservación de tortugas marinas desde 1995, habiendo trabajado con 6 de las 7 especies que existen en el mundo. Tenemos experiencia científica en estudios de playas de puesta y evaluación de poblaciones nidificantes de tortugas marinas en diferentes países como Chipre, Costa Rica, Guinea Ecuatorial o la República Dominicana. También hemos realizado estudios de alimentación, detección de amenazas e interacción de estas especies con pesquerías en España y otros países. En la actualidad estamos prestando especial interés en la interacción de tortugas marinas y basuras marinas. Coordinamos para el Mediterráneo español las acciones del proyecto europeo INDICIT II, sobre el uso de tortugas marinas y otras especies como indicadores del nivel de contaminación de nuestros mares y sus efectos en la salud y el bienestar de la fauna marina. También hemos participado en el proyecto europeo MEDSEALITTER para el estudio de las basuras en el Mediterráneo y su relación con áreas marinas protegidas.
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