Cartel del reto de Miguel Ángel Rodríguez.
El 2 de marzo, Miguel
Ángel Rodríguez inicia un reto personal para recaudar fondos con los que ayudar
a la Asociación de Enfermos de Crohn y Colitis Ulcerosa (ACCU) de Valencia. Va
a permanecer 24 horas pedaleando en una bicicleta indoor, conectado por Internet con otros ciclistas de toda España
para realizar distintos itinerarios juntos, todo ello en el gimnasio Enzo Sport
de Museros.
Joaquín Ponce es el
secretario de la Comunidad Valenciana y delegado de ACCU en Puçol. Miguel Ángel
Rodríguez es un deportista nato que al morir su madre, tras veinte años de
padecer la enfermedad de Crohn, se prometió a sí mismo dedicarle un homenaje
cada año en forma de reto deportivo.
De la unión de ambos
nació el reto para ayudar a los enfermos de Crohn: 24 horas de ciclismo de
salón, en total unos 600 kilómetros, con presencia de público, otros corredores
a través de la Red, folletos informativos, carteles, charlas, clases de spinning y el apoyo, además de ACCU, de
varias firmas comerciales, la peña ciclista de Massamagrell y la Diputación de
Valencia, que el 27 de febrero organiza la presentación pública del desafío.
“Queremos dar a conocer lo que es la enfermedad, la patología que
presenta en personas de distintas edades y, como no tenemos subvenciones,
tenemos que ingeniárnoslas para sacar adelante todas las campañas informativas
y de sensibilización”, apunta Joaquín Ponce. “Uno de los objetivos de la asociación es recaudar fondos para mantener
la investigación, de ahí que durante este desafío de las veinticuatro horas en
rodillo vayamos a poner un punto informativo para vender libros, revistas,
informar y también recoger donativos”.
ACCU Valencia nació
en 1993 como una asociación sin ánimo de lucro que agrupaba a los familiares de
enfermos de Crohn y colitis ulcerosa. El objetivo era dar a conocer la
enfermedad entre el gran público y mejorar la calidad de vida de los enfermos y
sus familiares. Y es que el desconocimiento es uno de los grandes problemas de
una enfermedad conocida desde hace poco tiempo.
“La Enfermedad de Crohn y Colitis ulcerosa es
relativamente nueva, y de origen desconocido”,
continúa Joaquín. “Hoy sabemos que hay
personas con una predisposición genética a padecerla, y aunque no se conoce la
causa de la enfermedad, en ambulatorios, centros de especialidades y hospitales
la conocen muy bien, porque día a día se investiga para saber más, fruto de
ello son los nuevos tratamientos cada vez más efectivos para combatirla”.
Una de
esas personas que conoce bien la enfermedad es Miguel Ángel Rodríguez, cuya
madre la padeció durante veinte años. Desde su fallecimiento, organiza cada año
un desafío personal en su memoria. Como además practica ciclismo de larga
distancia en la modalidad random, con
distancias de 200 a 1200 kilómetros, parece lógico que su desafío para apoyar a
ACCU lo haga montado en bicicleta.
“He recorrido distancias de 200 a 1.000
kilómetros, con los cuños en cada pueblo, como si fuera el Camino de Santiago,
algo preciso para poder optar a realizar oficialmente el desafío que tengo
previsto para agosto: Madrid-Gijón-Madrid. Es la distancia máxima de la
modalidad, los 1200 kilómetros, y eso exige un control médico exhaustivo y una
analítica muy controlada antes de la prueba”, explica Miguel Ángel. “Pero antes quiero participar en este desafío
solidario en el que el número de kilómetros recorrido no es importante, sino
recaudar fondos para luchar contra la enfermedad de Crohn y que el público se
lo pase bien”.
Para
lograr el desafío, Miguel Ángel ya trabaja con el asesoramiento de Julián Sanz,
aquel ciclista vasco que un buen día se atrevió a realizar 5.000 kilómetros en
bici, cruzando América de costa a costa: Julián controla la dieta y, sobre
todo, el aspecto psicológico, ya que la variedad de la carretera no es lo mismo
que la monotonía que puede acechar en el interior del gimnasio Enzo Sport de
Museros, donde se va a correr el desafío a partir del 2 de marzo a las 8 de la
tarde.
“Hace falta una cabeza bien amueblada y un
control de la respiración para lograr el desafío. Aunque también haremos
pequeñas paradas cada cuatro horas para ir al servicio, cambiarme de ropa y que
el fisio eche un vistazo”, continúa explicando el corredor. “No se trata de buscar un récord, sino de dar
a conocer una enfermedad, por eso vamos a montar otras bicis para hacer
spinning, incluso los que quieran pueden traerse sus propias bicis para
acompañarme en algunos tramos de la prueba y pedalearemos con gente de otras
provincias a través de una carrera virtual”.
Además de
Joaquín y Miguel Ángel, son muchos los deportistas, instituciones y empresas
que se han sumado a esta iniciativa solidaria: Enzo Sport cede gratuitamente
todas las instalaciones; Bkool aporta las bicis, rodillos y ordenadores para
realizar carreras virtuales por Internet; habrá clases de spinning a distintas horas del sábado y del domingo; habrá bicis
para alquilar y lo recaudado se destinará a ACCU Valencia; la peña ciclista de
Massamagrell aporta su presencia y el apoyo logístico; un equipo de ocho
personas colabora con Miguel Ángel para controlar al comida, la bebida y el
estado de salud del corredor… y todos los que se sumen podrán utilizar
gratuitamente la piscina, el spa y todas las instalaciones del gimnasio para
recuperarse del esfuerzo.
De todo
ello darán buena cuenta Joaquín Ponce y Miguel Ángel Rodríguez el próximo 27 de
febrero en el acto de presentación oficial del desafío, junto al diputado
provincial de deportes Miguel Bailach, que desde el primer momento también ha
apoyado abiertamente la prueba.
Y la cita
es desde el 2 de marzo a las 8 tarde hasta el 3 de marzo a la misma hora, en el
gimnasio Enzo Sport de Museros: si te atreves, anímate a pedalear con Miguel
Ángel. Si lo tuyo no son los desafíos, sencillamente, acércate y colabora con
la Asociación de Enfermos de Crohn y Colitis Ulcerosa de Valencia.
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