Las tarjetas de pago experimentarán una transformación radical en 2024, marcando un hito en la seguridad y la experiencia del usuario.
Las tarjetas de crédito y débito, conocidas por su comodidad en los pagos, están a punto de sufrir un cambio trascendental a partir del próximo año. El dinero en efectivo, cada vez menos utilizado, ha impulsado a las entidades bancarias a intensificar las medidas de seguridad para salvaguardar a los usuarios de posibles fraudes y estafas.
En un anuncio impactante, la multinacional de servicios financieros, Mastercard, revela su plan para introducir modificaciones con el objetivo principal de aumentar la protección de los datos al autorizar pagos en tiempo real. A continuación, desglosamos los detalles y cómo estos cambios afectarán a los usuarios.
La Nueva Era de las Tarjetas de Débito y Crédito:
En un giro audaz, a partir de 2024, las bandas magnéticas en las tarjetas de pago se eliminarán por razones de seguridad. Además, otro cambio significativo es la eliminación de la necesidad de introducir el PIN al realizar pagos. Estas modificaciones están diseñadas para brindar un nivel superior de seguridad y eficiencia en las transacciones cotidianas.
Despedida de la Banda Magnética:
A partir del próximo año, Mastercard dejará de emitir tarjetas de crédito con la tradicional banda magnética en todo el mundo, con la excepción de Estados Unidos y Canadá, donde este cambio se implementará en 2027. Este movimiento estratégico busca fortalecer la seguridad de las transacciones y adaptarse a las demandas de un entorno financiero en constante evolución.
La Seguridad en los Chips:
Varias entidades bancarias respaldan la decisión, destacando que los microprocesadores de los chips proporcionan un nivel de seguridad superior. Este nuevo sistema no solo protege a los usuarios contra fraudes, sino que también mejora significativamente su experiencia en el uso diario de las tarjetas de pago.
La revolución de las tarjetas de crédito y débito está en marcha, y los cambios anunciados por Mastercard marcan el comienzo de una era más segura y eficiente en las transacciones financieras. Los usuarios pueden anticipar una experiencia mejorada y una mayor tranquilidad al realizar sus pagos en un mundo donde la seguridad cobra cada vez más importancia.
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