Clotilde de Sorolla. Foto EPDA La consellera de Educación, Cultura y Deporte, Mª José Catalá ha explicado que "la 'marca Sorolla' está relanzando la actividad cultural de la Comunitat Valenciana. Qué duda cabe que el papel de la Administración es defender nuestro legado y poner en valor el patrimonio de todos los valencianos, como es la figura de Joaquín Sorolla"
"Esta puesta en valor la vamos a complementar con la ampliación de la Ruta Sorolla a tres ciudades de la provincia de Alicante -Alicante, Elche y Jávea- y acercaremos, de este modo, la vida y obra del pintor valenciano a una de sus inspiraciones artísticas: Alicante" ha indicado la consellera Catalá, quien ha añadido que "la ciudad de Alicante es el punto de arranque de los actos conmemorativos del 150 aniversario del nacimiento de Sorolla".
La consellera ha presentado la muestra 'Clotilde de Sorolla' acompañada por la Presidenta de la Diputación Provincial de Alicante, Luisa Pastor, la directora del Museo Sorolla de Madrid y comisaria de la exposición, Consuelo Luca de Tena y el director-gerente del Consorcio de Museos de la Comunitat Valenciana, Felipe Garín.
La inauguración de la muestra ha contado con la presencia de Víctor Lorente Sorolla, nieto del artista, quien ha colaborado en varias ocasiones en las investigaciones realizadas por el Consorcio de Museos y la Institución Joaquín Sorolla, en torno a la obra del pintor.
El Consorcio de Museos y la Fundación Museo Sorolla en colaboración la Fundación Conexus exhiben 'Clotilde de Sorolla', en el Museo de Bellas Artes de Alicante hasta el próximo 14 de abril.
La exposición, que fue presentada en Madrid y en Valencia el pasado año, es está dedicada a Clotilde García del Castillo (1865 - 1923) musa y esposa del pintor. Hija del fotógrafo Antonio García quien fuera mecenas del artista, Clotilde fue modelo constante en la obra de Sorolla y su generosidad está en el origen del actual Museo Sorolla de Madrid.
Catalá ha explicado que "esta exposición es una demostración más de la colaboración público - privada que en la que estamos trabajando desde la Generalitat. Estamos siendo capaces de reinventar nuestra política cultural, y qué mejor forma de hacerlo que promoviendo el intercambio de exposiciones de primer nivel, en este caso con el Museo Sorolla de Madrid". "Compartir la cultura nos enriquece a todos", ha señalado Catalá.
La muestra está compuesta mayoritariamente por fondos del Museo Sorolla de Madrid. Clotilde García del Castillo, legó al Estado la casa familiar y sus colecciones para hacer un museo en memoria del artista.
La exposición la conforman un total de 18 lienzos, 10 notas de color, 37 dibujos y 38 fotografías. De los 18 lienzos que se exponen 16 son fondos del Museo Sorolla de Madrid, uno ha sido cedido para la muestra por una colección particular y uno ha sido prestado por el Museo de Bellas Artes de Valencia 'Clotilde contemplando la Venus de Milo', una de las obras maestras de su colección. Una gran parte de los dibujos que podrán contemplarse son inéditos y se han restaurado para la ocasión un total de 24.
Son especialmente significativos los dibujos, casi todos inéditos, que salen por primera vez del Museo Sorolla, tras haber sido restaurados para la muestra. Completan la exposición objetos personales de la retratada así como cartas de Clotilde a Sorolla.
La exposición se estructura en cuatro ámbitos: 1. Intimidad, 2. La musa, 3. La mujer del gran artista; y 4. La fundadora del Museo.
La exposición en un reflejo de una historia de amor: el de Sorolla hacia su mujer, que se prodiga y se manifiesta, siempre fresco, en los incontables retratos y dibujos donde constantemente la representa, como digna y elegante esposa del gran artista en importantes retratos, o como compañera, como musa y madre, en apuntes, esbozos y dibujos que la captan en la intimidad de la casa, en los gestos espontáneos del juego con los niños, los trabajos rutinarios de costura o los ratos distraídos de lectura; y en las cartas asiduas, cariñosas y llenas de humor, y a veces profundas, reflexivas o melancólicas que le escribía cada día que pasaba separado de ella.
Y el de Clotilde hacia Joaquín, expresado no solo en el gesto final del legado, sino en el cuidado que puso, desde el primer momento de su relación y hasta su muerte, en guardar los testimonios de su vida común y del trabajo de Sorolla: todas aquellas cartas, las fotos, las listas de los cuadros que se enviaban a las exposiciones, las cuentas, que forman parte importante de las colecciones del museo y nos permiten hoy conocer el entramado de la vida cotidiana de Joaquín Sorolla y la sólida tierra que sostuvo su fulgurante carrera.
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