Aprobada en Comisión de Les Corts la ley impulsada por Podem que permitirá la revocación de los senadores territoriales

Momento de la votación

Todos los grupos parlamentarios de Les Corts Valencianes a excepción del Partido Popular han apoyado en la Comisión de Coordinación, Organización y Régimen de las Instituciones de la Generalitat de Les Corts Valencianes la iniciativa de Podem que permitirá la revocación de los senadores territoriales que incurran en comportamientos que susciten la pérdida de confianza parlamentaria fundada en actuaciones lesivas para los intereses de la Comunitat o provoquen el desprestigio de sus instituciones.

La proposición de ley presentada por Podem para la modificación de la Ley 9/2010, de 7 de julio, de la Generalitat, de designación de senadores o senadoras en representación de la Comunitat Valenciana ha alcanzado un amplio acuerdo en Les Corts, según ha destacado el síndic portavoz de este grupo parlamentario, Antonio Montiel. Solo se ha desmarcado de la aprobación del texto el Grupo Popular.

Montiel ha resaltado que gracias a la iniciativa impulsada por Podem, el Parlamento valenciano “será pionero en la aprobación de una norma que permita la revocación de senadores de designación territorial cuando realicen acciones contrarias a los intereses de la Comunitat o incurran en comportamientos indignos”.

A juicio de Montiel la ley implica “una reforma democrática importante, que se dirige a conseguir el establecimiento de un vínculo directo entre la acción de los representantes políticos y su rendición de cuentas y exigencia de responsabilidad”.También ha advertido que “no se trata de una reforma legislativa contra nadie” .

Asimismo, el síndic de Podem ha añadido que con esta reforma “sentamos un precedente, abrimos una brecha, mejoramos la calidad de la democracia y sobretodo, empezamos a caminar hacia un Senado que sea realmente una Cámara de representación territorial”, y ello sin perder el objetivo de Podemos de reformar el Senado para que sea más parecido al de otras democracias más avanzadas, como el caso alemán.

La revocación necesitará que sea promovida por al menos dos grupos parlamentarios que representen al menos una décima parte de los miembros de las Corts y que sea apoyada por una mayoría de dos tercios de la Cámara, sin oposición del grupo proponente del senador a revocar. Además, el grupo proponente deberá estar de acuerdo con que se plantee la revocación. Estos extremos, en opinión de Montiel, dotan a esta norma de mayor seguridad jurídica.

Igualmente, se incluye la obligatoriedad del senador territorial de comparecer ante la Cámara cuando sea llamado por ésta, a fin de evitar situaciones como la ocurrida el pasado mes de febrero, cuando la senadora territorial Rita Barberá, excusó su presencia en la Comisión de Coordinación, Organización y Régimen de las Instituciones de la Generalitat en la Cámara, que había solicitado Podem, para dar explicaciones sobre el caso Taula. Montiel ha insistido en que la reforma profundiza en la necesidad de que exista una fiscalización periódica del trabajo de los senadores territoriales.