Confecomerç CV (CECOVAL y COVACO), la Asociación
Valenciana de Consumidores y Usuarios (AVACU) y la Secretaría Autonómica de
Economía han dado a conocer esta mañana el perjuicio que supone la venta de
productos falsificados para el sector del comercio y para los ciudadanos, coincidiendo
con la campaña de Navidad, en un acto que ha contado con la presencia de Blanca
Marín (Secretaria Autonómica de Economía), Rafael Torres (vicepresidente de
Confecomerç) y Fernando Móner (presidente de AVACU-CECU).
Fernando Móner ha asegurado que los consumidores están ante una desprotección
total, por lo que se hace necesario combatir este tipo de comercialización de
productos, muchos de los cuales suponen un grave riesgo para la salud e incluso un
peligro para los más jóvenes.
Desde CECU se ha editado una Guía sobre las
consecuencias de las falsificaciones, en la que se recoge la repercusión que implica
este fenómeno cada vez más extendido.
Por su parte, el vicepresidente de Confecomerç CV ha destacado la necesidad de
potenciar la coordinación entre todos los agentes implicados y la Administración, dado
que es un aspecto fundamental, y por ello la insistencia de nuestra Confederación por
mantener periódicamente encuentros a fin de conseguir aunar esfuerzos entre todos y
alcanzar la implicación del sector del comercio como parte afectada”.
La Secretaria Autonómica, Blanca Marín ha resaltado las iniciativas impulsadas por
parte del Ministerio de establecer acciones para combatir la piratería como las llevadas
a cabo de la constitución de una Mesa del Intrusismo, el impulso de campañas de
concienciación, y otras medidas encaminadas a erradicar la venta ilegal como la
reforma de la Ley de Marca.
Los tres han coincidido en que la venta de productos falsificados genera múltiples
efectos negativos, a nivel económico, laboral, medioambiental y tributario y en la
necesidad de concienciar al consumidor para elegir en sus compras, especialmente en
estas fiestas navideñas, productos originales.
Por comunidades autónomas, según se desprende de datos del Ministerio del Interior
correspondientes al año 2016, Andalucía es la región donde más falsificaciones se han
incautado 407.492, seguida de la Comunidad Valenciana 380.622 productos. Es por
tanto nuestra autonomía, la Comunidad Valenciana, la segunda de España de mayor
venta de productos ilegales.
Además, cabe destacar que España es el segundo país de
la Unión Europea por detrás de Italia de mayor comercialización de objetos
falsificados.
Cabe destacar las cifras de participación de las marcas en las magnitudes económicas
de nuestro país: el 40% del PIB y el 60% del Comercio.
El daño que generan las
falsificaciones en España se estiman en un 9,3% de las ventas, y más de 40.000
empleos perdidos y un coste de 133 euros por habitante, lo que nos sitúa ligeramente
por encima de la media de la Unión Europea.
Para la administración, el sector del comercio y los consumidores la adquisición de
productos falsificados está cada vez más en auge, por lo que se ha resaltado la
necesidad de prevenir, controlar y poner freno a la comercialización de productos
falsificados, que se realiza a través de nuevos canales emergentes, como el del
comercio electrónico, dado que representa un daño igual e incluso mayor que el físico.
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