Ábalos (PSPV-PSOE) exige al Gobierno un plan urgente que garantice que la Albufera de Valencia reciba más agua y de mayor calidad

El portavoz adjunto del PSOE en el Congreso y diputado por Valencia, José Luis Ábalos, ha registrado una Proposición No de Ley (PNL) para instar al Gobierno a elaborar un Plan urgente de regeneración de La Albufera de Valencia, para garantizar que recibe agua de calidad y cantidad suficiente.

La PNL recoge que este plan de regeneración se elabore conjuntamente entre las comunidades autónomas y entidades públicas afectadas. Su objetivo, según el diputad, es “que la cantidad de recursos hídricos que reciba esta laguna costera no sólo garantice su mantenimiento, sino que las aportaciones sean suficientes para recuperar su situación previa al deterioro que hoy sufre".

José Luis Ábalos ha asegurado que La Albufera “se encuentra en un momento crítico y es necesario actuar para que su degradación no se convierta en irreversible”.

Según el diputado, pese a ser una zona especialmente protegida, “las decisiones sobre las aportaciones hídricas están provocando una situación de peligro, que se ha visto incrementada con la entrada en vigor del Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Júcar”.

Aportaciones insuficientes

Ábalos ha detallado que el plan fija las normas de gestión de la cuenca del río y en él se marcan los caudales que deben ir a La Albufera. “En este caso, se establece que las aportaciones hídricas al Parque Natural serán como mínimo de 167 hectómetros cúbicos y no se asegura que sea agua de calidad”.

En este sentido, ha asegurado que su caudal “se renovará sólo siete veces al año, a través de las golas que actúan como salidas naturales al mar. Durante los años 70 recibía 500 hectómetros cúbicos, lo que significaba que cada año sus aguas se renovaban 20 veces”.

El parlamentario del PSOE ha señalado que el agua que llega al Parque Natural proviene de tres vías diferentes: el río Júcar, las precipitaciones y los retornos de riego de los cultivos que lo rodean. “Los periodos de sequía que arrastra desde hace años la Comunitat y la modernización de la Real Acequia, que impide los retornos de agua, hacen que el futuro del Parque Natural prácticamente dependa de las aportaciones que le lleguen del río Júcar.