La economía con el
tiempo va mutando, y a medida que pasa el tiempo se va haciendo más fuerte,
pero a la vez, más extraña ya que tal vez nunca llegamos a pensar que una
persona podía tener dinero haciendo videos que otra persona viera, pero esta
modalidad, es lo que está representando la economía de este tiempo.
Algo que está
tomando la punta del iceberg en este tiempo, es lo que se denomina economía
naranja. La cual es un grupo de actividades que de manera continua, permite
que se generen nuevas ideas, las cuales se pueden transformar en bienes y
servicios culturales, cuyo valor se determina por la propiedad intelectual de
una persona.
A esta, también se
le denomina economía creativa y es lo que está marcando la pauta en este
tiempo. Para ello, no requieres recursos que salgan de la tierra como base de
una materia prima, sino que más bien se trata de los conocimientos que posees y
como estos, aportan a un cambio al entorno en donde se encuentra.
Desde que esto
salió a la luz, muchas Web y Empresas se han volcado a
establecer las bases de su negocio en la economía naranja. Muchas
personas, ya han comenzado a hacer uso de este tipo de economía, sin saber el
significado de la misma, pero aun así la utilizan y generan beneficios bastante
grandes.
Las bases de
esta economía vienen basadas en el diseño digital, artes visuales,
arquitectura, artesanías, entre otros. Este tipo de economía cubre
actividades como la moda, música, cine, juguetes, entre otras.
Este tipo de
economía se denomina naranja, ya que este color siempre suele asociarse con
todo tipo de manifestaciones culturales, identidad y creatividad. De acuerdo al
elprogreso.es, la misma viene
desarrollada por John Howkins y este es uno de los conceptos que está
revolucionando, sobre todo dentro del sector creativo.
Dado como vienen
evolucionando las cosas mundialmente, ya la economía, no puede basarse
solamente en todo aquello que produce la tierra debido a que los productos
naturales en algún momento se podrán acabar, pero la creatividad muere cuando
la mente que la produce muere, pero después, esta pasa de generación en
generación.
La economía naranja
es una puerta que abre la posibilidad de que todas las personas en el mundo
puedan mostrar sus talentos y con el boom de las redes sociales, así hemos podido observar
como este tipo de economía va tomando vuelo.
Podemos ver que una
persona, hoy día, puede generar grandes cantidades de dinero partiendo del
internet o subiendo publicaciones por medio de Instagram. No
específicamente tiene que ser una persona famosa para tener popularidad.
Este tipo de
economías se puede dar por talento, intelecto o carisma e inventiva. Por
ejemplo, si eres economista, no específicamente tienes que trabajar en una
empresa de economía para poder generar dinero, ejemplo de ello lo tiene Cashperplus, una web destinada a brindarte servicios de
préstamos y no esta netamente vinculada con un banco en específico, sino que
los vincula a todos de acuerdo a la demanda que tengan.
O en el caso de https://hinchables.org/ que te ofrece
productos desde una página web sin necesidad de tener que salir a un centro
comercial o a una tienda a comprar. Esto ha sido catalogado como la
economía del futuro y está destronando a muchos tipos de economías.
La animación es
otro rubro que representa la economía naranja, ya que parte del arte y genera
millones de dólares mediante el entretenimiento tanto a gran escala como
películas de cine animado, como a pequeña escala por medio de publicidad o
micros animados.
Uno de los beneficios
de la economía naranja, es que como mencionamos anteriormente, no depende
de ningún tipo de materia prima natural, por lo que, si en algún momento llega
a haber escases de productos por causa de la sobre explotación de los recursos
naturales, esto no afecta para nada a este tipo de economía.
Para darle respuesta
a las problemáticas que puede que sí afecten directamente a esta economía, como
la electricidad o internet. Ya hay ciertos inventos que forman parte de esta
economía y benefician a la misma, por ejemplo la creación de paneles solares
para producir más energía o la creación de satélites espaciales para tener
internet inalámbrico mundialmente.
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