Conferencia en la que la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, ha trasladado al president de la Generalitat, Ximo Puig, diez "medidas sanitarias urgentes avaladas por profesionales", en una imagen difundida por el PP. Reconocer a profesionales y a víctimas de la COVID-19, cesar al equipo de la Conselleria de Sanidad, replantear la Atención Primaria y apostar por la investigación son algunas de las diez medidas sanitarias urgentes avaladas por profesionales que la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, ha trasladado al president de la Generalitat, Ximo Puig.
Tras una llamada de Puig este jueves en la que le pedía ideas ante el pase a la fase 3 y después de constatar el "malestar y hartazgo" de sindicatos y profesionales por la gestión de la crisis, Bonig ha explicado su plan para "escuchar a la sociedad silenciada por el Botànic y Ciudadanos" en la comisión de reconstrucción.
La dirigente popular ha criticado, en una rueda de prensa telemática, que haya "200.000 mesas y una comisión para negociar, reconstruir y coser la Comunitat Valenciana para no hacer nada", lo que les ha llevado a "iniciar la propia hoja de ruta del PP" y a "volver a tender la mano" a Puig.
Ha argumentado que "ahora que la pandemia está más controlada", el gobierno de Puig debería trabajar de forma "coordinada" con los profesionales para establecer "protocolos claros" y analizar la gestión para preparar al personal y al sistema en caso de un rebrote.
"Podemos entender que ha habido improvisación y que esto nos ha venido a todos de nuevas, pero si hay un rebrote, esto ya no sirve. Si hay un segundo rebrote, el único culpable político será Puig y su gobierno", ha sentenciado Bonig, que ha informado de que trasladarán sus medidas tanto al president como a la comisión de reconstrucción.
Entre su decálogo, ha propuesto reconocer a los profesionales de la sanidad con la Alta distinción de la Generalitat el 9 d'Octubre, así como establecer el 11 de marzo, día en que la OMS declaró la pandemia del coronavirus, como fecha anual para el reconocimiento de las víctimas.
También ha propuesto aprobar un plus de peligrosidad como una paga extra de productividad para los profesionales de la salud "que se han enfrentado al virus durante el estado de alarma" por los bajos salarios que cobran.
"Es absolutamente necesario replantear el papel de la Atención Primaria", ha sostenido Bonig como otra medida urgente y ha propuesto establecer nuevos espacios, dotados de medios y con protocolos de seguridad y formación de profesionales para que los sintomáticos de COVID "no se mezclen" con el resto de pacientes.
Ha exigido igualmente la gratuidad de las mascarillas para "gente vulnerable" tanto con determinadas patologías como económicamente y ha exigido que el Gobierno rebaje el IVA de las mascarillas del 21 al 4 % porque como producto obligatorio "supone un dispendio económico que no todo el mundo puede asumir".
Para Bonig, se ha asistido a una gestión sanitaria con una Conselleria "desbordada, sin preparación, sin coordinación y sin medios humanos al frente", solo con la consellera y sin altos cargos, por lo que ha planteado "una revolución" y "cesar a todo el equipo", así como crear un Consejo Asesor permanente con miembros "designados por mérito y capacidad profesional".
Ha apostado por crear unidades sanitarias de emergencia COVID-19, que aglutinen a los profesionales que han luchado contra la pandemia para "intercambiar" ideas, procedimientos y protocolos que funcionan y elaborar guías y protocolos para aplicar en centros de salud y hospitales. "Eso hay que hacerlo ahora y no en octubre si hay un rebrote", ha sentenciado.
Para Bonig, también es "fundamental" crear equipos de coordinación sociosanitaria entre residencias de mayores y la Atención Primaria, y ha propuesto crear en los 24 departamentos de salud plazas especializadas de geriatría en medicina y enfermería.
Ha previsto crear programas específicos de investigación y un clúster de colaboración público-privada para convertir a la Comunitat Valenciana en "referente" en investigación de esta pandemia y otras futuras porque, a su juicio, la investigación ha sido "un horror" por la dispersión, la falta de unidad de criterio y malas condiciones.
"Son medidas muy concretas, que se pueden poner en marcha inmediatamente", ha valorado Bonig, para la que tras cinco años de gobierno de Puig no quiere "buenas palabras, sino hechos y gestión".
Preguntada sobre el compromiso en sede parlamentaria de hacer llegar a la oposición mascarillas, Bonig ha dicho que no les han llegado y que si tras el tiempo oportuno tras reclamarlas por los cauces legales siguen sin llegar, acudirán a los tribunales.
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