Campaña valenciana sobre los daños reales que produce la compra de productos falsificados

La Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (AVACU), la Conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Confecomerç y la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) han presentado la campaña que se va a desarrollar durante las próximas semanas y que tiene como objetivo concienciar a las personas consumidoras del perjuicio que supone la compra de productos falsificados, no solo para los ciudadanos sino también para el comercio, y los múltiples beneficios que la compra de productos de proximidad tiene a todos los niveles.

El presidente de AVACU ha dado a conocerlos resultados de un sondeo realizado a más de 500 familias de la Comunidad Valenciana, que nos ha dejado los siguientes resultados:

-la calidad es el aspecto más valorado al comprar un producto. En el caso de los productos de alimentación, el porcentaje asciende a poco más de un 49% y el precio quedaría en un segundo lugar, con un 26,5%. Para los productos no alimenticios, el porcentaje de los que destacan la calidad es de un 39,7%, seguido muy de cerca por el precio con un 38,7%.

-también se le da mucha o bastante importancia al lugar de origen del producto, siendo el porcentaje bastante superior en el caso de los productos de alimentación-si bien los consumidores se manifiestan contrarios a las falsificaciones(un 58% afirma estar en contra y solo comprar productos originales), un 23% ha adquirido en el último año algún producto falsificado

-los motivos que esgrimen para adquirir estos productos son, principalmente porque aseguran que "tienen la misma calidad y utilidad que el original, pero más baratos", y, en segundo lugar, "porque el precio es más económico que el de la marca original, aunque de peor calidad"

-el lugar de compra habitual de los productos falsificados es, para más del 40%, Internet, seguido de puestos de venta ambulante legal (un 32%) y el top manta / puestos de venta ambulante ilegal (19%). Los sectores en los que se adquieren más falsificaciones son, por este orden, ropa, calzado y aparatos electrónicos, complementos de moda, perfumería y cosmética y material y prendas deportivas y joyería y relojería y libros, música y películas.

Fernando Móner ha informado, además, sobre el contenido de la Guía práctica sobre los Riesgos de los productos falsificados, editada por CECU, y ha mostrado los trípticos que se han realizado y la imagen del cartel informativo que se ha repartido entre las asociaciones y federaciones sectoriales y territoriales de Confecomerç CV para que lo distribuyan entre sus comercios asociados.

Para el presidente de la CEV, Salvador Navarro, la lucha contra las falsificaciones exige la máxima coordinación entre todas las Administraciones; exige voluntad política a todos los niveles; pero pasa también, y quizás esto sea uno de los puntosmás importantes, por una mayor concienciación. “Debemos ser consumidores responsables, comprando en comercios lícitos que generan empleo, pagan impuestos y que por tanto contribuyen al bienestar social”, ha asegurado.

Por su parte, el presidente de Confecomerç CV, Rafael Torres, ha señalado la necesidad de trabajar conjuntamente entre todos los agentes implicados. La compra de productos falsificados genera competencia desleal y supone un grave perjuicio para nuestra sociedad, nuestra economía, para el empleo, por lo que se requiere prevención, control, seguridad, concienciación, al tiempo que vigilar y regular canales emergentes como el comercio electrónico.

El Conseller, Rafael Climent, ha apuntado como fundamental la formación y educación de todos, especialmente a edades más tempranas, en el ámbito del consumo y ha destacado la fuerza que las personas consumidoras tienen con su poder de decisión sobre qué comprar, dónde comprar...Climent ha remarcado la importancia de que las personas consumidoras realicen una compra consciente y sostenible, bien informada y sobre necesidades reales.

Todos ellos han coincidido en la necesidad de realizar un trabajo conjunto para informar y concienciar a las personas consumidoras de los riesgos y perjuicios que conlleva la compra de productos falsificados y todos los beneficios que adquirir productos originales tiene tanto para la economía y el comercio local como para la seguridad de los propios usuarios.