Imagen de pastillas de freno del sitio repuestoscoches24.es
Creado
a finales del siglo XIX y presente en los vehículos desde la década
de 1950, el freno de disco supuso una gran evolución de los
automóviles y permitió una frenada más segura y fiable. Las
pastillas de freno son componentes esenciales de este sistema y, por
este motivo, debe estar atento a los signos de desgaste. A lo largo
de este texto conocerás la vida útil de las pastillas de freno, las
averías más comunes y cómo saber cuándo es el momento de cambiar
las pastillas de freno.
Las
pastillas de freno tienen la función de generar fricción para
desacelerar y detener el vehículo. Para ello trabajan en conjunto
con el disco de freno -que puede ser de material metálico o incluso
de carbono, además de otros materiales-. Cuando se presiona el pedal
del freno, un sistema hidráulico empuja las pastillas contra el
disco, reduciendo la velocidad del automóvil.
Suelen
trabajar en pareja y cada rueda tiene un dispositivo de frenado. La
gran mayoría de los vehículos utilizan frenos de disco en la parte
delantera y frenos de tambor en la parte trasera, en los que las
pastillas se reemplazan por forros. La forma y el tamaño de estos
insertos varían mucho, dependiendo principalmente del tipo de
automóvil en el que se instalarán.
¿Qué
signos indican desgaste en las pastillas?
Saber
interpretar los signos de desgaste que presenta tu auto es muy
importante para mantenerlo siempre en orden, sobre todo en lo que se
refiere al sistema de frenos y sus componentes. Ignorar estas señales
puede traer pérdidas financieras y causar accidentes.
Los
signos de desgaste en las pastillas de freno son relativamente
fáciles de detectar, pero si nota alguno de ellos, no intente
repararlo usted mismo. Acude a un especialista lo antes posible.
Ruidos
agudos
Uno
de los componentes responsables de este comportamiento son las
pastillas de freno. Cuando están muy desgastados, empiezan a generar
un ruido muy molesto, provocado por el roce del disco de freno con el
metal presente en el soporte de la pastilla. Pero debes comprobar si
realmente son los responsables de los ruidos antes de salir a cambiar
las piezas. Otros problemas causan signos similares, como:
•
superficie
irregular del disco de freno;
•
flotación
de la pastilla en la pinza de freno;
•
mal
contacto entre las pastillas y el disco.
Pérdida
de eficiencia de frenado
Cuando
se desgastan, las pastillas de freno pierden eficacia y se nota
fácilmente. Ignorar esta señal resultará en daños a otras partes
del vehículo; sin embargo, como en el caso de los ruidos, no salga a
reemplazar piezas sin identificar correctamente el problema.
Además
de las pastillas de freno, la pérdida de eficiencia de frenado puede
ser causada por:
•
líquido
bajo o muy antiguo;
•
fugas;
•
tuberías
obstruidas.
Debe
ser consciente de cuándo se produce la pérdida de eficiencia. El
exceso de calor provocado por el uso constante de los frenos provoca
este tipo de comportamiento en ciertos modelos de pastillas, sin
embargo, no significa que haya una falla. Ahora bien, si se reduce la
capacidad de frenado, incluso en situaciones en las que el freno no
es muy exigente, es probable que haya
desgaste.
¿Cuánto
se tarda en cambiar las pastillas de freno?
La
durabilidad y, en consecuencia, el tiempo para cambiar las pastillas
de freno, varía mucho. El tiempo de cambio depende de algunos
factores, como el entorno en el que se usa el automóvil, la forma en
que el conductor usa el sistema de frenos, además del material de
fabricación.
Muchos
expertos recomiendan que en el caso de los conductores que optan por
conducir con tranquilidad, las pastillas de freno tienden a durar más
que aquellos que prefieren una conducción agresiva y, en este último
caso, se puede activar el sensor de desgaste, por frecuentes frenadas
bruscas. tan pronto como la ruta pasa 5.000 km. En condiciones
normales de uso, las pastillas duran al menos 15.000 km de recorrido.
¿Cómo
saber cuándo es el momento de cambiar las pastillas de freno?
El
primer consejo es prestar atención a los signos de desgaste que
mencionamos. Si nota alguno de ellos, revise las pastillas,
independientemente del kilometraje que haya corrido con ellas y el
tipo de compuesto utilizado.
Tenga
en cuenta el grosor del material abrasivo. Cualquier valor por debajo
de 2 mm significa que los insertos ya no están en condiciones de uso
y deben reemplazarse de inmediato. Las piezas de algunos fabricantes
tienen una marca que indica cuándo el componente está desgastado.
Si no hay tal marca, use una regla o un calibrador.
En
los vehículos más modernos, ni siquiera hace falta ensuciarse las
manos: a través de unos sensores, el propio coche es capaz de
identificar cuando las pastillas de freno no están en buen estado.
Cuando se detecta desgaste, se muestra una luz indicadora en el panel
de instrumentos o en la computadora de a bordo del vehículo. En
algunos casos, incluso hay una advertencia audible para alertar al
propietario de que se debe realizar el reemplazo.
Realice
siempre controles periódicos de las pastillas de freno y de todos
los componentes de este sistema tan importantes para su seguridad. A
la menor señal de problema, busque un profesional calificado.
La seguridad de las pastillas es esencial. /EPDA
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