Este sitio web utiliza cookies, además de servir para obtener datos estadísticos de la navegación de sus
usuarios y mejorar su experiencia de como usuario. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su
uso.
Puedes cambiar la configuración u obtener más información en nuestra política de cookies pulsando aquí.
Compartieron estudio hace décadas en diferentes locales y, sin embargo, nunca antes habían expuesto juntos
0
REDACCIÓN - 26/06/2012
Inauguración de la exposición. Foto: EPDA.
Compartieron
estudio hace décadas en diferentes locales y, sin embargo, nunca antes habían
expuesto juntos. Desde el pasado jueves es posible comprobar la perfecta
armonía con que dialogan en un mismo espacio las esculturas de Eduard Cortina y
las pinturas de José Estellés.
“Continuamos
nuestro ciclo dedicado a artistas de la casa con esta muestra –comentó el
concejal de Cultura y Comunicación, Ferran Vilella-, dos hombres que
profundizan en las diferentes capas del arte, con una trayectoria extensa e
impecable”.
La
pintura de Estellés bebe de referencias vanguardistas de la Rusia de principios
del siglo pasado donde es inevitable encontrarse con los guiños a Malévich,
pero también de la abstracción americana. La escultura de Cortina responde más
a una motivación personal sin aparentes vínculos a otros autores, acaso a la
tradición escultórica vasca. Obras talladas en sabina con medidas que van de
los pocos centímetros a las de más de un metro de tamaño.