El
sindicato CSI·F advierte de que Conselleria de Educación está
exigiendo la capacitació en valencià para acceder a vacantes a los
funcionarios desplazados, con plazas suprimidas en sus centros o
reingresados tras excedencia. De no disponer de esa capacitació, ven
limitadas sus opciones a las zonas catalogadas por la Administración
como castellanohablantes. La central sindical exige la revocación de
esa medida, vinculada al fin de la moratoria para acreditar la
capacitació.
La
Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) explica que
alrededor de 5.000 funcionarios docentes no tienen la capacitació en
valencià. No obstante, Educación exige en las vacantes convocadas
este año en los diferentes cuerpos para suprimidos y desplazados ese
requisito. Si no dispone de la capacitació, por ejemplo, un docente
con plaza en Valencia que vuelva tras una excedencia larga tendría
que impartir en la comarca de Utiel-Requena, o una docente suprimida
en Benidorm debería desplazarse a Elda.
CSI·F
exige a Conselleria de Educación que todos los docentes desplazados,
reingresados o con plazas suprimidas puedan concursar para optar a
vacantes tanto en zonas valencianohablantes como castellanohablantes
de cara al próximo curso escolar. El sindicato pide más diálogo a
la Administración y voluntad de intentar encontrar soluciones,
además de mejorar la formación.
La
central sindical muestra igualmente su disconformidad por el hecho de
que la Administración haya decidido catalogar en inglés, con la
acreditación de B2, la mayor parte de plazas ofertadas en Infantil
para adjudicar a personal suprimido y desplazado. El sindicato
considera que constituye una nueva limitación para docentes que ya
sufren el perjuicio de ver cómo su plaza ha sido suprimida.
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