El
sindicato CSIF advierte del colapso que se está produciendo en la
tramitación del Ingreso Mínimo Vital (IMV) en la provincia de
Valencia debido a la acumulación de expedientes y a la insuficiente
dotación de personal. La central sindical explica que la cifra
alcanza ya las 48.000 solicitudes a nivel provincial y recuerda que
el número de empleados públicos desciende por la falta de cobertura
de vacantes.
La
Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) señala que
la situación está llegando al extremo de que desde la presentación
de algunos expedientes ya han transcurrido tres meses sin que hayan
podido tramitarse debido a la saturación del servicio. Esto, en la
práctica, supondría denegación por silencio administrativo.
CSIF
explica que la plantilla del Instituto Nacional de la Seguridad
Social (INSS) en la provincia de Valencia ha perdido 74 trabajadores
en los últimos cinco años, en la mayor parte de los casos porque se
han jubilado y no han sido cubiertas sus plazas. En este contexto,
con una plantilla escasa y envejecida por falta de oferta pública de
empleo, se ha producido el incremento de la carga de trabajo.
El
sindicato advierte de que la sobrecarga aumentará previsiblemente
debido a la continuación de las jubilaciones y a que los expedientes
se acumulan. Además, puede perjudicar a otras prestaciones, ya que
trabajadores de distintos departamentos no pueden atender sus tareas
diarias de tramitación de diferentes expedientes, jubilaciones,
viuedad, etcétera, al asignarlos a tramitar el IMV. Esto provoca
retrasos en la resolución de los expedientes de pensiones y otras
prestaciones.
CSIF,
además, añade que el problema de tramitación se acentúa por las
complicaciones de numerosos expedientes que, además de conllevar un
procedimiento farragoso, carecen de documentos como el certificado de
empadronamiento, o coincide en muchos casos que el demandante ya
percibe la Renta Valenciana de Inclusión y, por decisión del
Consell, resulta incompatible que cobre otra ayuda. Este hecho
provoca que algunos solicitantes luego se desdigan. En general,
aproximadamente hasta el 80% de las peticiones son denegadas después
de haberse tramitado.
La
central sindical apunta también que la parte de la plantilla que se
presentó voluntaria para realizar las tramitaciones por las tardes
ha ido mermando por la falta de incentivo. El sindicato explica que a
la complicación de los expedientes se suma la escasa remuneración
por su tramitación que, además, los empleados públicos no cobrarán
hasta el segundo semestre de 2021.
CSIF
reclama al Gobierno un refuerzo urgente de personal en la Seguridad
Social en la provincia de Valencia, además de pedir una campaña
informativa que deje claro a quienes soliciten estas ayudas los
requisitos y las incompatibilidades que exigen. Esta última
circunstancia evitaría la apertura de expedientes y la dedicación
de un tiempo a ellos por parte de los empleados públicos, a pesar de
no cumplir los requisitos la persona solicitante, y centrar el
esfuerzo en aquellos aspirantes que sí que reúnen las condiciones.