El sindicato CSIF denuncia que el servicio
de Urgencias del hospital Arnau, en Valencia, se encuentra desbordado, con
pacientes que han pasado la noche en el pasillo y con los sillones llenos. La
central sindical lamenta la falta de planificación, ya que media planta de
Medicina Interna está cerrada por obras. A esta circunstancia se suma la
carencia de camas libres en Llíria para derivar pacientes, la escasez de
profesionales y los fallos en el sistema informático.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF)
explica que la situación se ha complicado esta semana con la entrada de más
pacientes, que se ha sumado a la limitación de camas. En la noche de ayer una
decena de personas no pudo ser ingresada en planta por no existir espacio
libre. También estaban llenos de pacientes atendidos los sillones de
Observación.
CSIF señala que el hospital afronta esta situación con una
plantilla insuficiente y con media planta de Medicina Interna cerrada por
obras, lo que implica que no puede usarse una treintena de camas. La
alternativa de utilizar el hospital de Llíria para remitir pacientes tampoco
puede realizarse debido a que también está lleno ese centro. A esta situación
se añaden los fallos que impiden el funcionamiento del sistema informático en
Urgencias, esencial para acciones básicas como diagnósticos o recetas.
El sindicato urge a Conselleria de Sanidad a destinar más
profesionales a Urgencias y a habilitar camas para trasladar a los pacientes de
Urgencias y poder ofrecer el servicio adecuado. También pide una revisión del
sistema informático con el fin de minimizar los fallos y evitar el perjuicio
que ocasionan en usuarios y profesionales.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia