El fútbol siempre ha sido uno de los deportes
más populares del mundo. Sin embargo,
hasta hace unos años, muchos torneos permanecían confinados a sus
zonas geográficas, limitados por una cobertura televisiva que no
siempre era accesible a nivel mundial.
Hoy,
las cosas han cambiado. De hecho, gracias al streaming todo ha
cambiado. Y para explicar el impacto que ha tenido en el deporte,
basta con echar un vistazo a las cifras de espectadores de torneos
como la Copa Africana de Naciones
y la Copa Asiática de Naciones.
Aunque tradicionalmente se consideraban eventos «locales», el
streaming los ha convertido en acontecimientos seguidos por millones
de espectadores en todos los rincones del planeta.
El
streaming ha roto las barreras
geográficas y ha enriquecido la
experiencia de los espectadores. Cualquiera puede seguir en directo a
sus equipos favoritos, con comentarios personalizados, estadísticas
en tiempo real y repeticiones accesibles en cualquier momento. El
fútbol se ha convertido así en un lenguaje universal, capaz de unir
a aficionados de todo el mundo.
Según
un estudio realizado por ExpressVPN,
2024 fue un año decisivo para el streaming deportivo y, en
consecuencia, también para el fútbol internacional. Aunque las
cifras que vamos a analizar son impresionantes, lo más interesante
de este cambio son los fenómenos y tendencias sociales que se
derivan a nivel cultural global. Veamos por qué.
El triunfo de las Copas de
África y Asia
El
año 2024 puso en el candelero acontecimientos futbolísticos que
sólo un pequeño nicho conocía y que, gracias al streaming,
superaron todas las expectativas de audiencia. Nos referimos a la
Copa Africana de Naciones (AFCON),
uno de los torneos más vistos
del año, con un total de 1.400 millones
de espectadores. La semifinal entre
Nigeria y Sudáfrica, en particular, atrajo a 10,3
millones de espectadores únicos: una
demostración del creciente atractivo internacional del torneo.
La
Copa Asiática,
organizada en Qatar, también registró resultados extraordinarios.
El torneo alcanzó los 707,3 millones de
espectadores totales, y la final entre
Jordania y Qatar contó con 69 millones
de telespectadores. Estas cifras
confirman cómo el streaming ha permitido que eventos especializados
encuentren nuevas audiencias en todo el mundo.
Ambos
torneos son ejemplos perfectos de cómo el fútbol se ha convertido
en una herramienta para contar historias
de diferentes culturas, traspasar
fronteras geográficas y conectar a millones de personas de todo el
mundo.
El streaming lo cambia todo
El
éxito mundial de estos torneos habría sido impensable sin el
streaming. En el pasado, este tipo de partidos se retransmitían
principalmente en canales de televisión regionales, que tenían una
cobertura limitada a las audiencias locales.
Hoy, en cambio, existen plataformas que, con sólo unos clics,
ofrecen acceso instantáneo, en tiempo real o incluso en diferido, a
los principales acontecimientos futbolísticos y deportivos del
mundo.
El
streaming transforma la experiencia del
aficionado, que puede acceder
libremente a resúmenes, estadísticas, análisis en tiempo real y
contenidos extra que enriquecen la experiencia visual. Ejemplos
clásicos de entretenimiento son entrevistas exclusivas con
jugadores, sesiones de entrenamiento entre bastidores e incluso un
enlace con la sala de árbitros.
Ya
estamos en un nivel muy alto en cuanto a la calidad y el alcance de
los eventos en streaming, como demuestran las cifras mencionadas; sin
embargo, dadas las maravillas que la tecnología es capaz de lograr,
es bastante seguro que habrá grandes y nuevos desarrollos en los
próximos meses, tanto para el deporte como para el mercado
mundial del streaming.
Comparte la noticia