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Por fin una buena noticia
proveniente de la Unión Europea (UE), que ha dictaminado como abusiva la ley
hipotecaria española. Este hecho supone un éxito de los colectivos que vienen
luchando en los últimos años para que los bancos no sean tan estrictos con
aquellas familias que no pueden pagar su hipoteca
El nuevo dictamen obliga al
Gobierno español a modificar la ley, en primer lugar, y servirá a los jueces
para tener más en cuenta a los usuarios, en la guerra abierta con los bancos en
la cuestión de los desahucios, que se han multiplicado desde que explotó la
burbuja inmobiliaria.
No era admisible que los
bancos, muchos de los cuales han recibido dinero público para no acabar hundiéndose,
se quedaran con la vivienda de miles de familias que no podían hacer frente a
su hipoteca y éstas, además de irse a la calle, se quedaban con la deuda.
El momento excepcional que
estamos viviendo obliga a que las administraciones y los bancos sean más
flexibles con empresarios y ciudadanos en el pago de sus deudas.
Ahora queda otra dura batalla
por delante: la de las Preferentes. Miles de personas han sido estafadas en
toda España y la justicia debería obligar a devolver hasta el último céntimo.
Causa sonrojo que entidades que han recibido dinero público no tomen la
iniciativa y entonen el ‘mea culpa’.