Lorena Silvent. /EPDA Cuando se acerca marzo y el 8M, los y las feministas tenemos claro que estamos ante una fecha clave para reivindicar, reflexionar, concienciar sobre la historia, dar visibilidad a las mujeres y debatir, pero no en un debate que divide a la sociedad y ralentiza los avances sociales.
El 8M es una fecha para visibilizar a las mujeres, para visibilizar ese papel que tenemos en la sociedad y que ha sido ocultado y minusvalorado durante tantos y tantos años.
Estamos hartas de encontrarnos a “señoros” que quieren desviar la atención, que quieren hacer creer a la sociedad que el Estado no ofrece seguridad a la ciudadanía, que se legisla sin garantías, que se improvisa.
Algo sucede en nuestro país y mucho debe molestar el avance en derechos de las mujeres, cuando el Gobierno aprueba subir el salario mínimo interprofesional un 8%, hasta los 1.080 €, y a los 20 minutos de la noticia, solo oímos hablar de la Ley del Sí es Sí.
Pues mal vamos, si no reconocemos los hechos de manera objetiva y caemos en la trama de hablar solo de unos efectos que se conocían y se habían puesto en los informes; que se les está dando más importancia que a la propia reforma de la ley que redefine los delitos y da mayor protección a las mujeres ante las agresiones y delitos sexuales.
¿Por qué no nos dicen cuántos agresores han quedado libres antes de esta reforma? ¿Por qué no nos dicen cuántas mujeres han visto archivadas sus denuncias por considerar que no había delito? ¿Por qué no nos dicen cuántos agresores verán incrementadas sus condenas?
Porque eso NO interesa, eso no crea polémica, solo es importante para el patriarcado hacer ver que el primer Gobierno en la historia de España en coalición no avanza, que no se entienden, que las Ministras no se llevan bien, que no visten apropiadamente, que no llevan sujetador, que están divididos … Pues a todos ellos y ellas, decirles que dejen de ser hipócritas.
Estamos en un momento que hay que dar soluciones a los problemas reales de la ciudadanía, conectar con la gente y sumar. Hay que destacar los puntos de encuentro por igual que los de desencuentro, lo importante es que las acciones de gobierno lleguen a la ciudadanía y se piensen siempre en el interés general. Me resulta muy sorprendente que en Europa seamos un país referente, y que desde dentro no nos dejen ver lo que los de fuera pueden apreciar.
¿Será que el patriarcado está nervioso porque pierde privilegios?
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