El alcalde y vecinos en la asamblea de Algímia. EPDA "El resultado presupuestario del ayuntamiento es excelente". Así de rotundo se mostró el alcalde de Algimia de Alfara, el socialista Paco Salt, ante los cerca de ochenta vecinos que asistieron a la asamblea general convocada por el primer edil para dar cuenta de diferentes asuntos municipales. Pese a que no estaba previsto, Salt tuvo también que responder a las dudas de los presentes sobre los recortes aplicados por el PP tanto a nivel nacional como autonómico y a la preocupación sobre la posible desaparición de los ayuntamiento de menos de 5.000 habitantes, algo que Salt calificó como "una barbaridad y un desconocimiento de la historia de este país".
La asamblea comenzó con el balance económico de la gestión municipal. "Entre todos hemos conseguido que el presupuesto de 2011 tenga un resultado positivo, ya que hemos terminado con un superávit de 76.000 euros", indicó el alcalde, para añadir que "pocos municipios de España han conseguido cerrar sus cuentas en positivo en la actual coyuntura económica". Al respecto, Salt quiso destacar el hecho de que "estamos cumpliendo con las directrices europeas sobre el déficit público, dado que mientras las recomendaciones comunitarias hablan de un déficit del 0 por ciento, el nuestro está en un 3,7 en positivo". "Y esto no lo dice el alcalde –aseveró- lo certifica el interventor". Salt continuó su exposición dejando bien claro que "estas son las cuentas y no otras, porque hay alguna gente que se alegraría de que fuera de otra manera, pero no es así y está documentado". Finalmente, tras explicar a los asistentes el Real Decreto sobre el pago a proveedores de las entidades locales aprobado por el ejecutivo de Rajoy, al que los consistorios tenían que adherirse de manera obligatoria en caso de tener facturas pendientes, Salt aclaró que los dos únicos municipios de la comarca que no han tenido que concertar un préstamo a un 5% de interés para saldar deudas han sido Algimia y Quart de les Valls "porque no debíamos ninguna factura del año 2011".
Las inversiones centraron la segunda parte de la exposición del primer edil, quien habló tanto de las que ya se han hecho –pavimentación del parque Botánico Cabanilles, caminos rurales, señalización de la carretera y creación de plazas de aparcamiento- como de las que está previsto desarrollar durante esta legislatura –finalización de las obras en el trinquet municipal, adecuación del Camí de les Valls o un Plan de Ordenación Vial-. Respecto a la construcción de un Auditorio Municipal, el primer edil matizó que se trata de una obra muy costosa –entre 600.000 o 700.000 euros- que acometeremos "en función de la situación económica".
En el apartado de ayudas sociales, el alcalde informó de que en el vigente ejercicio, el Consistorio destinará 110.000 euros a políticas sociales, lo que supone un 10 por ciento del presupuesto municipal. "Lo hacemos porque creemos en lo público y en estar al lado de los más vulnerables, aunque bien es cierto que como ayuntamiento no estamos obligados a ello", matizó Salt. Recordó las subvenciones a libros de texto tanto para Primaria como para Secundaria, las becas al comedor escolar -"si el ayuntamiento no ayudara el comedor ya se hubiera cerrado", subrayó-, la guardería infantil con un coste para los padres de 60 euros mensuales, los programas sanitarios o la atención a domicilio. "Les prometo que las ayudas sociales las vamos a mantener, aunque tienen que ser conscientes de lo complicado que nos lo están poniendo los señores Fabra y Rajoy con la eliminación de becas o la eliminación de medicamentos de la seguridad social", aseveró.
La asamblea vecinal concluyó con las preguntas de los vecinos sobre cómo les afectan los recortes del Partido Popular en educación, sanidad y dependencia o sobre la privatización de la sanidad valenciana.
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