Reunión telemática de Raga con el equipo directivo del área de Salud de Manises. / EPDA
Centro de Salud de Riba-roja. / EPDA El alcalde de Riba-roja, Robert Raga se ha
reunido esta mañana con el equipo directivo del área de Salud de Manises, con
objeto de trasladarle su preocupación ante las reiteradas quejas ciudadanas. Desde
que se decretara el estado de “nueva normalidad”, el Ayuntamiento de Riba-roja ha
detectado numerosas incidencias relacionadas con la atención telefónica y la
disminución en la asistencia presencial en el Centro de Salud del municipio.
Raga ha reclamado a los responsables sanitarios
una mayor atención
telefónica y más personal sanitario para garantizar una mejor asistencia en el Centro
de Salud. Por su parte, desde el área de Salud de Manises, se afirma que
“existe falta de médicos y personal de enfermería, así como administrativos que
quieran trabajar en Primaria”. A esta carencia- declaran- “se suman las
reiteradas bajas ocasionadas en algunos casos por ansiedad generada por esta
situación de crisis, los periodos vacacionales de los facultativos que se han
visto obligados a hacerlos coincidir con la época estival por un posible
rebrote en otoño y la imposibilidad de que algunos médicos de riesgo puedan atender
a pacientes Covid”. Asimismo-matizan- la
situación se agrava por el cierre del consultorio de Loriguilla, del que
detallan “no podemos abrirlo porque si cumplimos con las medidas sanitarias el
aforo se reduce a tres personas y es inviable”
Los responsables sanitarios alertan de una
“gran presión asistencial que puede verse acrecentada si se suceden a partir de
otoño nuevos rebrotes de la enfermedad”. Como fruto de la reunión, el gerente
del Hospital de Manises, Ricardo Trujillo ha hecho públicos los datos del mes
de mayo en el Centro de Salud de Riba-roja, en el que se registraron 22.000
atenciones en Primaria, 12.000 asistenciales, 1.725 de atención continuada y
2.238 en Pediatría”.
Trujillo se ha comprometido en “estudiar una
solución” que minimice las consecuencias de la gran demanda asistencial
existente.
Ante esta situación, el alcalde de Riba-roja,
Robert Raga ha solicitado una nueva reunión con directora general de Régimen
Económico e Infraestructuras de la Consellería de Sanidad Universal y Salud,
Carmelina Pla para trasladarle su preocupación. “Debemos exigir una asistencia
sanitaria pública que atienda las necesidades médicas de la ciudadanía, ya sea
a través de consultas telefónicas o asistencia presencial en casos en los que
no pueda resolverse por teléfono”, asegura Robert Raga, alcalde de Riba-roja
quien asegura “el cierre de Loriguilla y la mayor afluencia a segundas
residencias obligan a incrementar el servicio para atender al incremento de
demanda”
El Ayuntamiento de Riba-roja ha colaborado
activamente con el Centro de Salud desde el inicio de la pandemia. La instalación
de una gran carpa exterior con una fuente pública y un dispensador de hidrogel
a las puertas del consultorio ha permitido garantizar la seguridad de los
pacientes y realizar un triaje previo para detectar posibles casos de Covid.
Asimismo el consistorio ha participado en la distribución de mascarillas a los
colectivos de riesgo, al personal médico y a los usuarios de las residencias,
ha dotado de 20 pulsioxímetros al centro médico para su uso en pacientes de
riesgo y ha proporcionado información a los usuarios.
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