Cristina RamónEl fútbol es todo un sentimiento que se despierta en nosotros siendo niños y que nos acompaña durante toda nuestra vida. Todos hemos vivido nuestra primera vez de la mano de nuestros padres o hermanos mayores, esa ocasión en la que la inmensidad del estadio nos hace abrir los ojos de par en par y disfrutar de la grandiosidad del espectáculo como si fuera la última vez que vamos a disfrutar de un partido en directo. El cosquilleo por el deporte rey estuvo siempre presente en la vida de Ihsan y Mümtaz, dos aficionados del Fenerbahçe que acudían sin falta a cada uno de los partidos y a los que el equipo turco ha rendido un emotivo homenaje tras su fallecimiento. Mümtaz falleció hace unos años e Ihsan lo hizo este mismo mes de diciembre. En unas gradas vacías por la pandemia del Covid, el club ha colocado la imagen del matrimonio en sus gradas para agradecerles el apoyo y la fidelidad durante tantos años. Un bonito recuerdo que ha emocionado a todo el mundo del fútbol.
Gestos como este denotan el verdadero espíritu del fútbol y del deporte en general, el apoyo incondicional a tu equipo en todo momento, a las duras y a las maduras. Los colores de un equipo se sienten de una forma especial, tanto que solo el propio aficionado puede llegar a entenderlo. Es una pasión de tal calibre que es difícil explicar que se siente ante un triunfo o una dolorosa derrota de tu amado equipo. El fervor y la ilusión que despiertan el fútbol y el deporte son una de las medicinas que ayudan a los ciudadanos a desconectar de todo lo relacionado con la pandemia del Covid19, la cual está empezando a causar un hartazgo evidente en la población. El deporte y la cultura son una vía de escape en estos tiempos convulsos e inciertos. Un gol, una victoria de nuestro equipo o un buen monólogo de humor nos hacen disfrutar más que nunca en estos días.
Ishan y Mümtaz han sido homenajeados por su equipo en un momento en el que las gradas de los estadios de fútbol deben permanecer vacías, lo que ha hecho el momento todavía más especial. Hay toda una generación, la de nuestros mayores, que está marchándose por culpa de la pandemia en silencio y sin una sola caricia, algo que encoje el corazón solo de pensarlo. El pequeño homenaje a los ya célebres “abuelos del Fenerbahçe” es también un recuerdo velado a todos esos mayores que también amaban el fútbol y a los que el coronavirus se ha llevado sin pedir permiso durante los últimos meses. Seguro que haya donde estén seguirán disfrutando con sus queridos equipos.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia