La concejala de Hacienda, Carmen Benlloch. EPDA Los ciudadanos de La Pobla de Farnals han tenido que realizar este año un mayor esfuerzo para hacer frente al pago del recibo del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) -conocido popularmente como Contribución-. Concretamente, el montante total se ha incrementado en un 10 por ciento fruto “de las decisiones adoptadas por el anterior gobierno del Partido Popular”, denunciaron fuentes del ejecutivo actual, que esperan frenar esta escalada impositiva.
La decisión plenaria sobre la Contribución que los vecinos pagarán en 2016, que afecta únicamente al tipo impositivo que se aplica y que es la única variable sobre la que la administración local tiene potestad, se adoptará a finales de este ejercicio -previsiblemente en la sesión de noviembre-, para cuando el gobierno tripartito presidido por Enric Palanca (PSPV) espera tener ya consensuada una propuesta para ajustar a la baja los impuestos y tasas municipales, sobre todo el gravoso Impuesto de Bienes Inmuebles.
Para explicar la subida en el IBI de este ejercicio, fuentes socialistas repasaron lo ocurrido en los últimos años de la anterior legislatura para informar de que fue el PP el que a finales de 2014 solicitó al Ministerio un incremento del 10% de la base del recibo sin acompañarlo de un ajuste del tipo, lo que desemboca en la subida que ha habido este año. La concejala de Hacienda, Mª Carmen Benllóch, manifestó al respecto que “no está en desacuerdo con que se pida un incremento de la base del catastro porque eso supone una mayor participación en los tributos que nos ingresa el Estado al pueblo, pero es preciso ajustarla con una bajada del gravamen para no asfixiar a los vecinos”.
Desde el PP, José Manuel Peralta remarcó que su gobierno no hizo más que atender a lo que estipula la normativa. La última revisión catastral de La Pobla data de 1996 “por lo que el Ministerio está apremiando al Consistorio para que actualice los valores”, señaló el exalcalde, quien subrayó que ellos lograron retrasarlo “para no perjudicar a los vecinos” pero aún así se vieron obligados a subir ese 10 por ciento. También aludió a la “pésima” situación económica que heredaron del gobierno de la moción de censura, “que nos obligó a realizar un Plan Económico-Financiero que el PSOE no apoyó en su momento y, sin embargo, ahora que están gobernando, ha refrendado”, dijo. Peralta no cree que el actual gobierno puede cumplir su promesa de bajar impuestos “dada la situación de las arcas municipales”, concluyó.
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