Participantes en la carreraTal y como estaba previsto, los
corredores de fondo José Genovés, Carlos Plantado, Javier Sandalinas y Paco
López consiguieron completar los 44 kms del primer maratón de montaña ‘Senda de
los cartujos-Travesía del silencio’, que partiendo desde la plaza del Olmo de
Navajas une las cartujas de Valldecrist en Altura y Porta Coeli en Serra.
Con la consecución de este reto
preparado desde hace meses, en el que colaboró como asesor cultural de la
travesía el iniciador de este camino y miembro de la Asociación Cultural
Cartuja de Valldecrist, José Ángel Planillo, informando detalladamente del
recorrido y del gran contenido histórico y natural que lo sustancia, se ha
conseguido poner sobre la mesa una nueva forma de conocer esta cercana y
extraordinaria ruta que anduvieron durante siglos aquellos viejos cartujos y
que hoy supone una gran oportunidad cultural, histórica, deportiva, natural y
también personal en nuestra Comunidad Valenciana.
Este nuevo maratón de montaña que
aprovecha laSenda de los Cartujos,recién señalizada por el
Parque Natural de la Sierra Calderona,supone la unión de Castellón y
Valencia a través de un pasillo natural entre dos grandes sierras, Espadán y
Calderona, ofreciendo una gran oportunidad turística y social para las comarcas
de Camp de Turia y Alto Palancia mediante una ruta plena de diversidad
geológica y vegetal que la enriquecen de forma exponencial.
José Bienvenido Genovés Badía,
promotor de esta prueba, nos destaca todos estos aspectos de este maratón
especial que lograron culminar con éxitoen
5h y 20 minutos y que con intención de facilitar su utilización a grupos e
instituciones así como su disfrute general, ha sido subido a internet en la
página wikiloc con el nombre "Navajas-Cartuja Portacoeli (Senda de los
Cartujos)", subrayando del día de la carrera el disfrute deportivo
y personal, al encontrarse con fauna local al amanecer,con los
bellos rincones que descubrieron cerca de Masía de Uñoz,con las
vistas magníficas al dejar atrás el Pico del Águila, disfrutando del mar con
las Islas Columbretes en el horizonte,con los frondosos barrancos de
rodeno y alcornoques, con los renacidos pinares repoblando de verde las
montañas y con esa mirada interior que nos dejaron los viejos cartujos y quenos
permite valorar y agradecer... un auténtico tesoro, un verdadero y cercano
regalo que muy fácilmente podemos disfrutar.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia