Padres y madres del Ceip San Juan de Ribera, en uno de los actos reivindicativos El vicesecretario de Educación del PSPV-PSOE, Miquel Soler, se
encuentra realizado visitas a los centros educativos de l’Horta Nord para
recabar información de primera mano que les permita tener un diagnóstico certero
de las necesidades reales antes de las elecciones autonómicas de 2015. Con el
resultado de este trabajo de campo se confeccionará una lista de actuaciones
prioritarias que, en la comarca, “encabezará el colegio San Juan de Ribera de
Burjassot, en el caso de que el actual gobierno de la Generalitat Valenciana,
no resuelva la histórica problemática en los próximos meses”.
Así lo confirmó el responsable socialista tras un recorrido
por este centro y por los colegios Villar Palasí y Virgen de los Desamparados,
en el que estuvo acompañado por el alcalde de Burjassot, el también socialista
Rafa García, y por el máximo responsable de la coordinadora local de Ampas,
Màrius Fullana.
Este último aprovechó la presencia de Soler para sacarle un
compromiso: la construcción de un nuevo colegio (frente a la remodelación
prometida por el actual ejecutivo de la Generalitat) si gobiernan en menos de un
año. La petición contó con la respuesta afirmativa de Soler ante la urgencia de
un actuación que, además, solucionaría las
reivindicaciones de los otros dos centros de Burjassot que acogen ahora a los
alumnos del San Juan de Ribera, desalojados por los daños estructurales que
sufre una parte de las instalaciones, y que han tenido prescindir de diversas estancias
como el gimnasio, la biblioteca o el aula de informática.
Fullana recordó
que la lucha por un colegio digno comenzó hace más de veinte años. Ante la
falta de respuestas de la administración autonómica, “que lo único que hizo fue
invitar a los padres a matricular a sus hijos en otros centros”, se constituyó
una comisión para intentar conocer los planes de Conselleria. El pasado 12 de
mayo, “solicitamos una reunión con María José Catalá pero nos recibió el
secretario autonómico de Educación, Rafael Carbonell, quien no dijo que sí a
todos nuestros planteamientos”, contó el representante de la comunidad
educativa, quien añadió que “conforme se acerca la fecha en la que se
comprometieron a iniciar las obras de remodelación del centro escolar, vemos
que, nuevamente, no se mueve nada, por lo que tememos lo peor”. Fullana aseguró
que continuarán peleando porque “la comunidad educativa está muy concienciada y
no está dispuesta a arrojar la toalla” y porque “contamos con el apoyo del
ayuntamiento de Burjassot”. Precisamente fue
Rafa García,
alcalde del municipio, el que fue más combativo a la hora de denunciar los
continuos incumplimientos de la Conselleria de Educación con un centro que está
en una situación de grave deterioro y con unas familias que han vivido momentos
duros por esta problemática histórica. Para aliviar la situación, desde el
Consistorio de Burjassot se han adoptado medidas como derribar el edificio
contiguo para la construcción del nuevo inmueble o acondicionar un solar para
ubicar las aulas prefabricadas para albergar a los alumnos durante las obras.
Tras la toma de posesión, García solicitó una reunión con el presidente de la
Generalitat, Alberto Fabra, pero “todavía no he recibido respuesta”, remarcó.
Respecto a la
situación del resto de infraestructuras educativas de la comarca, Miquel Soler
señaló que “aún no podemos dar más detalles porque estamos elaborando la lista”,
aunque aseguró que el peor centro es el colegio San Juan de Ribera. Además de
adquirir el compromiso respecto a este centro y a todos aquellos que precisen
de actuaciones urgentes, el dirigente socialista manifestó que en materia
educativa su partido tiene otras cuestiones prioritarias para “volver a
dignificar la educación”: reducir las ratios, incrementar la oferta pública de
0 a 3 años, recuperar las becas y firmar convenios con los ayuntamientos cuando
consideremos que pueden gestionar mejor algunos aspectos educativos.
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