Esta vez la excusa nos la pone una cita de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, publicada el pasado 8 de mayo en Las Provincias: «Tenemos una ubicación perfecta, al igual que un clima envidiable y el Gobierno no tiene interés de que tengamos el mejor puerto y el más bello»… «Queremos ofrecer el mayor puerto deportivo de España y que los capitanes quieran estar en Valencia por los servicios que les ofrecemos»… «Desde el primer momento hemos liderado la defensa de los chiringuitos para que continúen en nuestras playas»…
El puerto comercial de la ciudad de Sagunt, que pertenece como es natural al Término Municipal de la ciudad de Sagunt, no lo gestiona la ciudad de Sagunt, ni pinta nada la comarca del Camp de Morvedre.
No existe una Autoridad Portuaria de Sagunt-Camp de Morvedre, que dirija el “negocio portuario” que se ejecuta tráfico a tráfico, mercancía a mercancía, a través de la costa saguntina, … con sus lejanas maderas y sus colaterales mosquitos “tigre”, … con sus miles de toneladas al año de gas licuado, etc.
Los ciudadanos de Sagunto mayoritariamente lo ignoran; no tienen ni “pajolera idea” del “chorro” de millones (de euros) que genera ese negocio; ni que ese negocio se lo ‘manejan’ al 50% entre el Ministerio de Fomento y el Puerto de Valencia, esta vecina y próxima ciudad capitalina y hermana, dirigida con la misma mano de hierro (y la otra de J. D.) desde 1991, y que sí tiene una Autoridad Portuaria de Valencia, cuya web os invito a visitar.
Se podría decir por tanto que “el Puerto no pertenece a Sagunto”.
Esta situación, aunque desconocida por los ciudadanos que pagan los impuestos municipales del Ayuntamiento de Sagunto, no es “natural” ni es lo “normal”, ni siquiera es “lógica”, es decir, es tan absurda que incluso, si uno pagara allí sus impuestos municipales, se consideraría estúpido, por lo clamorosamente injusto de la gestión del beneficio de ese negocio portuario multimillonario, para con los ciudadanos de Sagunt y del Camp de Morvedre.
Motril es una ciudad costera de Granada cuyos 60.000 habitantes (parecido número al que tiene Sagunto) sí controlan su negocio portuario mediante su Autoridad Portuaria de Motril (y con el Ministerio de Fomento del Gobierno de España) desde hace unos años (pocos); y su negocio portuario en cifras es significativamente menor que el que genera el tráfico del puerto de Sagunto. ¿Se podría decir que los ciudadanos de Sagunt y, más aún, los de su Puerto, son estúpidos?
Repasando su reciente historia, en el 83’ se produjo el trauma que vivió Sagunt por la “reconversión industrial” del sector siderúrgico, y parece ser que, Altos Hornos de Sagunto (de Vizcaya o del Mediterráneo, que así se llamó la cosa antes de convertirse en ARCELOR para ir a parar a “MITAL”), “devolvió” en esa crisis el Puerto Marítimo a su propietario natural, el Ayuntamiento de la ciudad de Sagunto; lo que se rumorea que pasó es que el desgobierno que reinaba en susodicho Ayto era gordo, el alcalde y varios concejales estaban algo dimitidos, y aquello del Ayuntamiento se llevaba con una gestora provisional que presidía un voluntario político de emergencia, que obedientemente firmó una “cesión” de la gestión de su negocio al entonces Puerto Autónomo de Valencia.
Dejemos para los historiadores de la curia, perdón, para los cronistas de la(s) villa(s) del Camp de Morvedre, la profundización y esclarecimiento de los exactos términos jurídico-administrativos de tal cesión de negocio y de explotación foránea, de un bien natural-patrimonial que los romanos ya consideraron “poner en valor”, el puerto de Sagunto.
Recapitulemos: el millonario negocio del tráfico de mercancías del puerto de Sagunto lo lleva el puerto de Valencia y los saguntinos no son estúpidos, ni siquiera los del Puerto, lo que pasa es que están tan generosamente desinformados, que dejan que la riqueza que se genera en su puerto la “administre” el Ayuntamiento de Valencia y su Autoridad Portuaria, en hermana comunión con el Ministerio de Fomento, la Comunidad Autónoma de Madrid…etc.
Se nos rebajaría la indignación si leyéramos unas imaginarias declaraciones, similares a las del principio de este artículo, por parte de los representantes municipales (políticos, sindicales, empresariales, culturales, … la sociedad civil…) de Sagunto-Puerto y/o de la comarca del Camp de Morvedre, por ejemplo en estos términos: “tenemos una ubicación perfecta, y un clima envidiable y el Gobierno de Valencia no tiene interés de que tengamos nuestro puerto….., queremos ofrecer uno de los mejores puertos deportivos de la comunidad valenciana, y que tanto el tráfico marítimo comercial como el deportivo quieran estar en el PUERTO DEL CAMP DE MORVEDRE por los servicios que les ofrecemos…. nunca, nunca Valencia nos ha dejado liderar nuestro negocio más antiguo, por milenario y natural, y tan necesario para el desarrollo de nuestra economía del bienestar local y comarcal…”.
(Ambivalencia: Estado de ánimo, transitorio o permanente, en el que coexisten dos emociones o sentimientos opuestos, como el amor y el odio. RAE. Nombre de esta sección de opinión que señala el estilo con el que 'El Otro Valenciano' firmante, pretende abordar temas en los que palpite una contradicción manifiestamente productiva, generadora de sentido común).
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