El Rototom Sunsplash se despide con más de 200.000 asistentes de 76 países

Según el balance presentado este viernes por la organización, las casi 300 actividades del programa cultural del Rototom han sido disfrutadas por 202.000 personas, entre los que destacan la alta presencia de familias y niños, con 11.000 menores de 13 años, y 3.800 asistentes con discapacidad.Los asistentes, que han llegado desde los cinco continentes consiguiendo visitas de más de 76 países, han sido la mayoría de España y Francia, seguidos por Reino Unido, Italia, Alemania, Estados Unidos, Suiza, Portugal, Suecia y Países Bajos, entre otros.

El día de mayor afluencia ha sido el sábado 17 de agosto con 34.000 personas y un cartel liderado por Busy Signal, una jornada que casi roza el máximo de aforo de la zona de acampada, un sector que "ha registrado una afluencia importante durante toda la semana".Otros de los tres grandes picos de público han sido la jornada inaugural con Chronixx y Macaco a la cabeza, el miércoles 21 de agosto con Ziggy Marley y la jornada de clausura del festival, en la que tuvo lugar el "Green Valley & Friends", un show especial para conmemorar los diez años del festival en España.En cuanto a las actividades extramusicales, el Foro Social y Atava (African Village) han hecho de sede de grandes intervenciones a modo de debates y charlas entre las que han destacado la líder indígena brasileña Sonia Guajajara, la representante española del movimiento por el clima Fridays for Future, Gemma Barricarte, o el activista pro derechos humanos Sani Ladan. 

El Rototom Sunsplash también ha sido retransmitido en tiempo real por internet, tanto conciertos como actividades, consiguiendo un 130 % más de visualizaciones a través de cinco canales habilitados que han logrado una audiencia de siete millones de personas en todo el mundo, destacando las visitas estadounidenses. Para hacer honor al lema de la edición, "Stand up for Earth", el festival ha logrado el sello "Plastic free" suprimiendo todas las botellas de plástico, evitando 11.000 kilos del material y la emisión de más de 16.000 kilos de CO2. El festival dice adiós, así, a una edición que "ha pivotado sobre cuestiones prácticas en la defensa de la Madre Tierra" y que ha mantenido "su guiño solidario y social" con la campaña de vasos reutilizables con Greenpeace, la iniciativa de donación de alimentos y el punto informativo Respect contra la LGTBifobia y las agresiones sexistas.