Para
entender la importancia de la tradición
es clave saber qué nos aporta como sociedad. Entendemos por
tradición aquellos usos y costumbres que en el pasado hemos
utilizado como sociedad y que, por tanto, definen la identidad
cultural de un grupo, una región o cualquier otro colectivo humano.
Esta tradición transmite una serie de valores y enseñanzas
vinculadas a cuestiones como la ética, la moral y las normas
sociales, pero también a la forma de hacer actividades cotidianas.
Gracias a ese planteamiento, la tradición
sirve para brindar una cierta estabilidad y para dar a la sociedad un
elemento cohesionador que le permita funcionar de una manera
adecuada.
El
efecto del progreso
Respecto
al progreso, es obvio que todas las sociedades tienen la necesidad de
avanzar en su planteamiento. Este progreso generalmente está
relacionado con los avances tecnológicos, pero también con nuevas
formas de pensamiento que promueven nuevos derechos para sus
ciudadanos. Una prueba la tenemos en los avances que ha tenido España
en los últimos tiempos, por los cuales, conductas que anteriormente
se han considerado machistas, racistas o xenófobas hoy en día están
mal vistas en la sociedad.Estos
cambios suponen un paradigma nuevo respecto al planteamiento más
tradicionalista. Y es cierto que esas mejoras son beneficiosas, pero
hay otros aspectos donde la diferencia no es tan notable y que pueden
suponer riesgos para la persistencia de la tradición.
Esto
afecta a cuestiones como nuestra forma de trabajar, de realizar
tareas cotidianas o al ocio. Por ejemplo, hemos pasado del cine a la
plataforma de streaming o del casino físico a los casinos online que
encontramos en Bonusfinder
España. En consecuencia, mantener
un adecuado equilibrio entre ambas tradiciones y nuevas costumbres
resulta clave para que la sociedad sea mejor.
Manteniendo
el equilibrio
Llegados
a este punto es obvio que la evolución debe estar presente en la
sociedad, pero se debe conservar también la tradición. Esto
implica, por ejemplo, la posibilidad de modernizar ciertos aspectos
tradicionales y adaptarlos a la sociedad moderna, tal como pasa con
ciertas medicinas
orientales ampliamente
reconocidas. La tecnología actual permite adaptar sus usos y
aprovechar esos conocimientos para fomentar el bienestar de la
sociedad.
Esto
también ocurre, por ejemplo, con las recetas más tradicionales.
Estas son hoy en día más saludables o más fáciles de realizar
gracias a los nuevos electrodomésticos disponibles. Una cuestión
aplicable también a la fabricación de productos, dado que muchos
métodos tradicionales de fabricación pueden conservarse, pero
también optimizarse con tecnología moderna.
Conclusión
En
definitiva, en aquellos casos en los que sea necesario preservar la
memoria, es obvio que las tecnologías actuales hacen el trabajo
mucho más fácil. La digitalización de documentos, lugares y el uso
de herramientas especiales para tratar piezas históricas son una
gran ayuda para conservar ese legado y hacerlo más accesible a toda
la sociedad de forma sencilla.
En
cualquier caso, es importante que, durante estos procesos, la
tradición no suponga un freno al progreso de la sociedad en general.
No son pocas las ocasiones en las que el culto a la tradición sirve
para mantener estereotipos o costumbres que deberían ser erradicadas
por su carácter sexista, racista, xenófobo o clasista. En estos
casos, la sociedad deberá luchar para eliminar esos sesgos y
convertir la sociedad actual en una disponible para todas las
personas, sin importar su condición personal.