Estefanía Berlanga (alcaldesa de Fuenterrobles) Tres legislaturas de gobierno de Izquierda Unida. Es usted una rara avis en el panorama político.
Bastante, sí. De todos modos, mis vecinos me han demostrado que me han votado a mí sin plantearse las siglas. Aquí, no obstante, la izquierda ha sido prácticamente siempre la fuerza más votada.
¿Se presenta a la reelección?
La gente quiere que me vuelva a presentar pero yo ya he dicho que ya está bien. 12 años son suficientes.
Es difícil gestionar el pueblo con mayoría simple.
Nos quedamos a once votos de conseguir el cuarto concejal, que hubiera sido la mayoría absoluta pero yo trabajé igual cuando tuve dos concejales, cuando tuve cinco o ahora que tengo tres. Siempre intento hablar con todos los representantes antes de llevar un tema al pleno. Intento escuchar y recoger todas las consideraciones que me hacen, siempre que es posible. Por eso, salvo alguna cosa puntual en esta legislatura, prácticamente todos los temas que se han elevado a pleno se han aprobado por unanimidad.
¿Y el hecho de que su formación no tenga representación en las Cortes le ha cerrado puertas?
Yo me he llevado muy bien con todo el mundo siempre. Cuando he tenido que pedir, no he mirado cómo se llamaba ni qué siglas había en su puerta. Ni en las dos legislaturas anteriores con el PP ni ahora. De hecho, sin la Diputación, no sé qué pasaría con los pueblos pequeños porque agiliza mucho la burocracia que en Conselleria es casi impenetrable.
No comparte entonces la opinión de quienes abogan por eliminar las diputaciones.
No hablaban con conocimiento quienes promovían la desaparición de las Diputaciones, no vivían en pueblos de interior y posiblemente no tenían alcaldías. Diputación es muchísimo más cercana y es muy accesible. Tanto con Jorge Rodríguez como con Toni Gaspar –incluso fui por una cosa y me resolvió otra.
¿Cómo están las arcas municipales?
En 2012 teníamos una deuda de 194.000 euros de la que 187.000 era dinero que no nos había llegado de la Conselleria. Hubo que hacer un esfuerzo, empezar a decir “no” a algunas cosas a las que siempre habíamos dicho “sí” y a priorizar servicios sociales y el mantenimiento del agua por encima de otras cuestiones importantes pero no imprescindibles como las fiestas… En este momento tenemos un superávit importante pero como tenemos que cumplir la regla de gasto y tenemos que tener remanente positivo, no se puede tocar. Nos obligan a guardar un dinero sin valorar si supera nuestras necesidades de inversión medias. Fuenterrobles siempre ha cumplido la regla de gasto, estamos pagando mucho antes de los 30 días legales, hay facturas que entran hoy y hoy mismo se pagan.
¿Qué medidas concretas se han tomado en la legislatura?
Nuestra prioridad cuando llegamos al gobierno fue la construcción del pozo nuevo ante la construcción de nuevas granjas. Tras la nevada de 2016, hicimos un depósito de 600 m3 para tener agua al menos cuatro días si se fuera la luz. También contratamos grupos electrógenos para los dos pozos sin esperar a que Iberdrola los pusiera.
¿Y la situación laboral?
Somos de los pueblos que menos desempleo tiene gracias a las granjas. De hecho viene gente inmigrante al pueblo porque es necesaria para trabajar en las explotaciones que tenemos. Al campo sí que es verdad que hace años venía gente de fuera para trabajarlo pero ahora es una minoría. De los 49 km2 de Fuenterrobles, el 80% es viñedo, cada vez se están poniendo más almendros y un poquito de olivar. Hay dos cooperativas, una bodega privada, restauración... Y todo eso soporta, de forma razonable las necesidades de empleo de Fuenterrobles.
La colección museográfica y el catálogo de árboles monumentales son dos de los reclamos más importantes de la localidad.
Al estar en la ruta del vino y formar parte de la DO recibimos muchos autobuses que hacen parada para comer y para ver nuestra colección museográfica de la que nos sentimos todos muy orgullosos o para hacer la ruta de árboles monumentales o singulares señalizada.
¿Y qué se ha quedado en el tintero?
La planta de purines. Tenemos muy claro que los agricultores tienen que convivir con los ganaderos si no, Fuenterrobles, dejará de ser Fuenterrobles. Estuvimos pendientes de un proyecto de Diputación con larvas de mosca (ecodíptera) pero no funcionó. Tenemos un preproyecto con la Universidad de València, hemos mirado ayudas europeas pero es algo que se nos ha quedado ahí por desarrollar. Incluso estudiamos la posibilidad de aprovechar los restos de poda y generar energía a partir de unos peles para autoabastecernos y conseguir una economía circular pero hemos ido teniendo otras prioridades (nieves, aguas, caminos…) que nos han impedido llevar a cabo la solución a este tema.
Se nos ha quedado también hacer un entorno natural en la zona de la Vega porque sí hemos arreglado toda la acequia para que vuelva a correr el agua. Ahí queríamos poner un vallado con carteles pero no vamos a llegar a tiempo. Y la adecuación de las instalaciones deportivas, fundamentalmente del campo de fútbol. Aquí, por un problema de titularidad (el campo no era municipal), no hemos podido sustituir hasta ahora la superficie del terreno de juego. Ya está solicitado el cambio y nos están dando muchas facilidades pero aún está en trámites.
La gente también demandaba una glorieta, incluso nosotros la llevábamos en el programa, pero tampoco hemos podido ponernos en ella hasta ahora que por fin creo que se va a poder hacer realidad en un breve espacio de tiempo.
¿Y el Plan General?
No es necesario un plan general tal y como lo conocemos.
Sí unos cambios puntuales en las normas subsidiarias para solucionar problemas de planeamiento y poder tener un pequeño polígono. El pueblo no va a crecer mucho más y con el terreno que tenemos es suficiente para ofrecer los servicios que necesitan nuestros vecinos. Sí que debemos reordenar algunas propiedades que se construyeron fuera de ordenación.
No hemos hablado de despoblación.
Fuenterrobles es el único pueblo de la comarca que no entra dentro de los municipios con riesgo de despoblación. La pirámide se consolidó con un boom de nacimientos que tuvimos en 2013-2014. Luego, la crisis también favoreció que algunas familias regresaran al pueblo. También tenemos un considerable número de población inmigrante con niños. Por eso no nos dan subvención, pero que todos los problemas sean así.
Ahora tenemos compitiendo un equipo benjamín y un alevín y están entrenando los prebenjamines. Pero es que el año que viene entran también los juveniles. Vamos a tener cinco equipos el año que viene. La población joven tiene granjas que es el principal foco de atracción y las viñas, el otro gran reclamo de empleo. En los últimos cinco años, al menos 10 familias jóvenes con niños se han venido.
Y luego, los servicios. Aquí un ingeniero agrónomo,animadores socioculturales, un profesor de Educación Física, ludoteca con extraescolares financiadas por el Ayuntamiento, talleres para niños y un monitor que da Deporte a los mayores. En definitiva, Llevamos 10 años estables. Podemos bajar a 695, subir a 710, pero podemos decir que en la última década no hemos perdido población.
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