Imagen de una protesta del movimiento feminista. EFE/Archivo La nueva plataforma 'Front Abolicionista del País Valencià', que integra a 31 movimientos feministas de la Comunitat Valenciana, exige a los partidos que se comprometan con la abolición de la prostitución, la pornografía y los vientres de alquiler.
En el caso de que no apuesten por abolir estas "formas extremas y brutales de violencia machista y patriarcal", como aseguran en sus objetivos fundacionales y reza su manifiesto, el movimiento ha advertido de que hará "campaña contra los partidos" en las próximas elecciones generales.
Una de sus portavoces, Concha Hurtado, ha explicado a EFE que el Front Abolicionista del País Valencià, que aglutina prácticamente a todo el movimiento feminista valenciano, se une a la plataforma estatal y a los movimientos que han surgido en otros territorios en sus reivindicaciones.
De hecho, ha comentado que trabajan en la creación de una coordinadora de ámbito estatal para "desarrollar acciones conjuntas", y que van a participar en una manifestación en Barcelona el próximo 11 de mayo organizada por el movimiento abolicionista de Cataluña.
"El objetivo es luchar por la abolición de la prostitución, la pornografía y los vientres de alquiler. Denunciamos a partidos políticos por dar voz al lobby proxeneta y vamos a exigirles que se comprometan a esta abolición, o las feministas haremos campaña contra ellos de cara a las elecciones", ha indicado.
Hurtado, de la plataforma Traductoras para la abolición de la prostitución, ha explicado que Front Abolicionista del País Valencià se ha constituido este viernes en un acto en el que han leído el manifiesto en el que critican que el "patriarcado y el capitalismo forman con estos negocios una alianza criminal que vulnera derechos humanos fundamentales".
En el documento critican que España se esté convirtiendo en un "paraíso de turismo sexual", incluso de menores, y aseveran que los vientres de alquiler no son una forma de reproducción asistida, sino "una explotación de mujeres y venta de sus bebés".
Creen que considerar la prostitución un trabajo y legislarla como tal "perjudica a todas las mujeres" y que "el lobby proxeneta corrompe medios de comunicación, instituciones, partidos políticos y movimientos sociales con el dinero obtenido de la esclavitud de mujeres y niñas".
Afirman que "el feminismo es abolicionista" y exigen medidas contra la violencia sexual y el abuso sexual infantil, la desarticulación de redes criminales de pedofilia y el fin de la impunidad de proxenetas, así como ayudas sociales, una asignatura específica de educación afectivo-sexual o campañas disuasorias.
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