FRENTE A LAS ADVERSIDADES, "MAGDALENA, FESTA PLENA".

La maldita pandemia nos privó de las Fiestas de la Magdalena del 2020 y 2021. El COVID sigue cohabitando con nosotros y el riesgo persiste con una incidencia menor.

Igual que no estuve de acuerdo con los hospitales de campaña, infrautilizados y un gasto innecesario (en las tres provincias había hospitales privados con camas vacías), al principio podía comprender las dudas por la pandemia a la hora de programar las fiestas, actos y lugares de celebración del equipo de Gobierno PSPV, Compromís y Podemos, conocido por "El Pacte del Fadrell". Aunque con el tiempo, no tenía sentido ver como las Fallas de Valencia contaban con todos sus actos, mientras las fiestas de la Magdalena de Castellón no tenían casi actos programados, generando una gran inseguridad en pequeños y medianos empresarios que viven de estas fiestas.

Pero, por otro lado, igual que ha denunciado el grupo municipal de Ciudadanos, no puedo comprender que faltando días para el inició de las Fiestas, no hayan pagado las ayudas a Las Gaiatas, a las que además rebajan paulatinamente año tras año los importes. Ni tampoco comprenderé los agravios comparativos que se producen entre los entes festeros.

El PSPV pudo gobernar en Castellón sólo con Ciudadanos, lo tuvo fácil, pero prefirió hacerlo con Compromís y Podemos, teniendo un gran comienzo de legislatura con la famosa subida de sueldo de un 50%. Los despropósitos y las rencillas del tripartito han sido una constante en estos años, paralizando la acción de gobierno.

Si hacemos un ejercicio de memoria comparativa y retroactiva de nuestras calles principales y sus comercios 8 años atrás y la actualidad, veremos nuestro retroceso y no digamos si vamos a todo lo que iban hacer y no han hecho.

Bueno, algo van a hacer, remodelar la Avenida de Lidón contra la opinión de los vecinos o pintarnos unas rayas paralelas en las aceras y decirnos que eso era un "carril bici", pero ojo que no te atropellen. Incluso cerrarnos el tráfico en algunas de las principales arterias de la ciudad con elevadas multas mediante control de cámaras, cuando los comerciantes están en contra porque ahuyenta a los clientes. Creo que lo fácil, lo hacen difícil.

Pero no nos preocupemos, ya se respira año electoral, nos anunciarán y venderán a bombo y platillo alguna remodelación, las calles y avenidas que están pidiendo a gritos el asfaltado serán asfaltadas antes de que se pongan las urnas y quizás algún conejo salga de la chistera del "Fadrell", luego pasarán las elecciones y vuelta a sestear.

Pero este mal que dura 8 años en Castellón es menor, si lo comparamos con la pandemia, con la invasión de Ucrania y la guerra de Putin o con la política internacional de bloques y la repercusión económica, con el incremento de precios descomunal que sufrimos y no hemos conocido en décadas. Todo son desdichas, pero a pesar de todos los pesares, saldremos adelante. Seguro.

Esta semana, no viviremos la cruda realidad, ahora nos toca desconectar, vivir la fiesta, presumir de castelloneros y después de tres años tenemos lo nuestro, lo de todos, la nostra Magdalena y sí, sí, será Festa Plena.

Bones Festes Castelló.