Vicente Pérez Costa. Los socialistas del
PSPV-PSOE de l’Horta Nord hacemos un llamamiento solidario,
consciente y responsable a todos y cada uno de los ciudadanos y a las
administraciones públicas para un consumo responsable de bienes
naturales como el agua. Mentalizar a la ciudadanía mediante campañas
de la urgente necesidad de hacer un consumo responsable.
Los modelos de gestión
de las infraestructuras y equipamientos del ciclo del agua en las
ciudades y poblaciones deben ajustarse a la condición irrenunciable
de que el agua es un bien público, debiéndose de gestionar desde lo
público. El ahorro en el consumo de agua es una de las fuentes
alternativas con mayor capacidad de suministro. No podrá hablarse
de un precio ajustado para el ciudadano mientras no se hayan
alcanzado unos umbrales de eficiencia razonables en la gestión, y
homogéneos entre las Administraciones responsables. La reutilización
del agua en las sucesivas etapas del ciclo contribuye a hacer más
sostenible el modelo de gestión, reduciendo los consumos energéticos
y los tratamientos de depuración. Invertir en circuitos de
aprovechamiento de aguas grises puede generar notables ahorros en
gasto corriente. También la I+D+i aplicada a la gestión del agua
servirá para evaluar la eficacia de las políticas municipales y el
buen hacer de sus responsables.
El modelo de
externalización de la gestión del agua nos lleva la privatización
de los servicios públicos de agua supone una mercantilización de un
bien público indispensable, convirtiéndose en una mercancía, y una
mercancía es todo aquello que tiene un valor económico y cuyo valor
se usa para comerciar.
Cuando el interés
económico de particulares (accionistas) prima sobre el interés
colectivo que la sociedad tiene en el agua, ésta se torna más
mercancía y menos servicio público.
Hemos heredado un modelo
de gestión mercantilista donde la administración y más aún en las
pequeñas corporaciones locales, ante la falta de medios el modelo de
gestión del agua se ha mercantilizado, haciendo de este bien público
-y escaso- de una mercadería muy valorada por las empresas
especializadas en su gestión.
La necesidad de implantar
políticas de inversión en las infraestructuras hídricas, son una
necesidad real de cada ayuntamiento, mejorar la eficiencia de la red
solo se consigue con dotaciones económicas en los presupuestos
municipales para invertir en mejorar las infraestructuras hídricas.
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