Operarios trabajan en la colocación Los técnicos que trabajan en las obras de rehabilitación de la
Basílica de la Virgen de los Desamparados de Valencia prevén iniciar mañana la
pintura del exterior del templo, según han indicado hoy a la agencia AVAN
fuentes de la Basílica, que han precisado que también hoy ha llegado el nuevo
toldo que se extenderá sobre la plaza de la Virgen.
Las
labores de pintura, que se prolongarán durante tres semanas, comenzarán en la
fachada sur o trasera, cuyos muros y paños serán enlucidos con silicato de
color “rojizo suave”, mientras que las pilastras y elementos sobresalientes
quedarán con “tono arena”, con lo que la Basílica “recupera su estética
original”.
El
color rojizo, “que imita al ladrillo de los muros del tambor de la cúpula”, ha
sido “muy rebajado para que tienda más a un marrón natural”. Por su parte, el
tono elegido para los elementos que sobresalen en la fachada, como pilastras y
balcones, es un “ocre muy suave o color arena”, han añadido las mismas fuentes.
Igualmente,
ha comenzado la pintura del edificio anexo de la Basílica en un color “azul valenciano”
para que se diferencie y “distinga bien del templo”.
Una
vez enlucida la fachada principal, está prevista la retirada de los andamios
que fueron instalados para la rehabilitación de la cubierta de la Basílica, al
haber concluido ya estos trabajos así como la instalación de los nuevos
anclajes que sujetarán la lona del nuevo toldo.
Llega el nuevo toldo
Igualmente,
esta mañana ha llegado el nuevo toldo a la Basílica donde ha sido subido a la
cubierta con un montacargas. No obstante, quedará plegado hasta que los
técnicos concluyan la colocación de los cables, que van sujetos también al
edificio de enfrente, y los ensayos de seguridad de los anclajes así como del
mecanismo para extenderlo.
El
nuevo toldo reemplazará al anterior, instalado en 1967, que “pesaba el doble y
estaba dañando la estructura del templo dado que se sujetaba sobre la misma
cubierta”, han añadido.
En
la actualidad, “los trabajos para la sujeción del toldo están muy avanzados”.
Los automatismos “están terminándose de instalar” una vez han sido colocados ya
los cinco anclajes, de hormigón armado y acero inoxidable, sobre la estructura del
templo, en cada uno de los cinco muros estribos de la cubierta recayente a la
plaza de la Virgen.
De
esta manera, “reemplazan a las antiguas sujeciones que descansaban sobre la
misma cubierta, y que provocaron numerosas grietas y fueron empujando la
fachada a lo largo de los años”.
El
nuevo toldo, que contará también con “sistema de seguridad y recogida automático
en casos de lluvia o velocidades de viento superiores a los 25 kilómetros por
hora”, tendrá 1.200 metros cuadrados de superficie, combinará los colores beige
y azul celeste y pesará la mitad que el anterior, “no llegando ni al kilo el
metro cuadrado, muy poco para lo que es la superficie”, han añadido.
Según los arquitectos, “no es una intervención
agresiva y en todo momento la obra será reversible, por lo que el toldo podrá
ser sustituido en cualquier momento”.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia