Foto de familiares y amigos que han querido sumarse al acto. Foto: EPDA.
Esta mañana se ha inaugurado
oficialmente un monumento que recuerda a los primeros pobladores de La Canyada,
e hijos predilectos de Paterna, Pascual Berenguer y Emilia Martínez. Se trata
de dos bustos de bronce de 10 kilos de peso, moldeados a partir de una antigua
fotografía, y elevados sobre una peana de tres toneladas de peso. El lugar
escogido por la familia, tras estudiar varias alternativas, fue la rotonda
principal de acceso al barrio en la CV 368.
La historia de La Canyada, a través
de la memoria colectiva de aquellos vecinos que les conocieron, reconoce al
“Tio Pascual” y a “doña Emilieta” como primeros colonos del barrio, que al
amparo del ferrocarril fueron también los primeros en abrir un negocio en La
Canyada, cuando no había aún ninguna vivienda y todo cuanto se encontraba a su
alrededor eran pinos, algarrobos y viñedos. Aunque inicialmente se dedicaban al
cultivo de viñedos, fue al parecer Emilia Martínez, esposa de Pascual Belenguer,
quien emplazó a su marido a iniciar un
pequeño negocio para vender agua fresca, coñac, ‘barquets’ y ‘cachaps en el
apeadero. Lo que inicialmente era poco más que un puestecito, se convirtió en
una barraca de “canyes i senill” y finalmente en un edificio con 9
habitaciones, dónde cada vez acudía más gente a degustar las paellas de lo que
en aquella época pasó a llamarse “Casa Pascual”. Hay que recordar que en los
años 30 y 40 fueron muchos los que se acercaban a La Canyada en busca de
tranquilidad y aire puro, motivo por el cual el negocio fue creciendo.
Más de 90 años después la Familia de
Pascual Beleguer y Emilia Martínez ha querido homenajear a sus antepasados, en
un acto al que se han unido algunos de los vecinos más antiguos de La Canyada,
así como el párroco José Zarzo, que ha bendecido el monumento. Han participado
también los concejales Elena Martínez, Vicente Sales e Ignacio Gabarda. Adela
Belenguer, en representación de la Familia, ha agradecido la colaboración del
Ayuntamiento y el hecho de que se nombrará hijos predilectos de Paterna a sus
antepasados. “Nuestro deseo era que se recuerde la figura de Pascual y Emilia,
pues aunque estaba recogido en algunos libros no existía una referencia en el
pueblo como la que hay a través de este monumento”, apuntó. Elena Martínez, en
representación del Ayuntamiento, consideró que “reconocer nuestras raíces nos
indica el camino a seguir”, al tiempo que mostró su reconocimiento por la
figura de aquellos que fueron los primeros en vislumbrar el futuro que
aguardaba a un barrio como La Canyada, que tras 90 años supera ya los 10.000
habitantes censados siendo una envidiable zona residencial.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia