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La cuarentena y las vacaciones aumentan exposición de los niños en las redes

Así, hay que tener en cuenta que para publicar fotos de menores de hasta 14 años debe haber una autorización de los padres

EFE - 19/08/2020

A partir de los 14 años, el menor puede decidir sobre su identidad digital y, si considera que ha dañado a su honor, en casos extremos puede denunciar a sus padres, alertan los expertos. EFE

La cuarentena y las vacaciones han aumentado la exposición de los niños en las redes sociales a través de fotografías y vídeos de menores, ante lo que la empresa de ciberseguridad S2 Grupo ha elaborado un decálogo de recomendaciones para proteger la imagen de los menores en internet.

Así, hay que tener en cuenta que para publicar fotos de menores de hasta 14 años debe haber una autorización de los padres, y si tienen entre 14 y 18 años deben dar ellos su consentimiento. Sin el consentimiento por escrito, no hay que publicar fotos de otros niños, y si se hace hay que pixelar o tapar el rostro.

Además, no hay que publicar con geolocalización y hay que evitar que aparezca información que identifique al menor; nunca hay que subir imágenes del niño sin ropa (algo muy común en bebés en playas o piscina, o a la hora del baño), y hay que ser selectivo con lo que se publica y no permitir que toda su vida sea publicada.

La empresa alerta de que hay que hacer un uso responsable de las imágenes en Internet para ser un ejemplo ante los hijos; nunca hay que etiquetarles con su nombre, para evitar que salgan en buscadores como Google; y solo hay que compartir imágenes con personas de total confianza.

Si se hacen publicaciones en redes, no hay que publicarlas para todo el público, y hay que recordar que cualquier imagen que se publica en la red es muy difícil eliminarla por completo.

Según José Rosell, socio-director de S2 Grupo, cuando se comparten fotos de los hijos o sobrinos se suelen cometer tres errores, como son aportar datos personales con la foto, lugar y hacerlas públicas, y "sin darnos cuenta estamos generando una identidad digital a este menor que será casi imborrable en el futuro".

A partir de los 14 años, el menor puede decidir sobre su identidad digital y, si considera que ha dañado a su honor, en casos extremos puede denunciar a sus padres, alertan.

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