Modesto Martínez.
Cuando
hablamos de cultura, especialmente popular, nos referimos al sentir
del pueblo, a sus tradiciones, en definitiva: al conjunto
de
saberes, costumbres, creencias y pautas de conducta de un grupo
social, incluyendo los medios materiales que usan para comunicarse
entre sí. Por ello, hablar de aberración cuando nos referimos a una
manifestación cultural arraigada en toda nuestra región resalta,
cuanto menos, una indigencia cultural regional a niveles
desorbitados.
Como
comentaba, hace un tiempo,
leía
que varios representantes políticos en les
corts,
mi parlamento autonómico, el de todos los valenciano, el de los
taurinos y de los que no lo son, se referían así hacia la
manifestación cultural que amo, cuido y defiendo.Todo
para oponerse a la inclusión de nuestros festejos en la nueva
asignatura de cultura
del poble Valencià.Increíble,
pero cierto.Sí,
hablo de cultura, de manifestación cultural por que los “bous al
carrer” son eso: el sentir del pueblo. Un sentir que en 2013
tuvo
6139
representaciones
en 285 escenarios
diferentes. Pero, voy más allá, hablo de la vergüenza que siento
al escuchar a un político de mi Comunitat referirse así hacia
nuestros festejos taurinos tradicionales, sea del partido que sea.
Algo que ningún aficionado debe consentir, como digo, venga del
partido que venga.
No
voy a entrar en un debate político, ni de toros si o toros no, voy a
apelar a todos aquellos que se han abanderado como defensores de
nuestras señas de identidad que lo hagan también por esta, una seña
de identidad que en cuanto a expansión geográfica puede ser de las
más importantes. Voy a pedirles
un
favor: si no les gusta por lo menos no la ataquen. Cuando escuché
esto me vinieron a la cabeza las palabras de D. Andrés Amorós,
cuando defendió la ILP en congreso de los diputados: “Esta
Fiesta no es oligárquica, eso es rotundamente falso. La Tauromaquia
no es ni de derechas ni de izquierdas, ni de ricos ni de pobres, es
del pueblo, de todos los que creemos en el pueblo"
Y
yo, lo digo
como lo siento pero:
creo en el pueblo y, más si cabe, en esos pueblo donde sus gentes y
sus representantes políticos defienden sin esconderse la fiesta del
toro.
Otro
debate, podría ser el que quieren hacer algunos “políticos”
sobre la supuesta financiación de los festejos populares por parte
del gobierno autonómico. ¡Señores! Busquen donde existe
esa partida presupuestaria,
ya que ningún aficionado lo hemos visto, y luego hablen. Este último
tema dará para otro articulo.
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