Olmedo Lopez-Amor. EPDA. Para afirmar con precisión si algo sube o baja no siempre debemos tener en cuenta el punto de vista de su observador, hay personas o cosas que ascienden al cielo del reconocimiento o descienden al infierno de la defenestración, indiscutiblemente, por su propio peso, y la grandeza o bajeza de las mismas se sobrepone a toda perspectiva, a todo principio de incertidumbre. Hoy, el ascensor sube por primera vez — de manera objetiva— para valorar a esos actantes de la cultura valenciana que tratan de sobreponerse a una situación tan adversa como la de la pandemia, hándicap que viene a sumarse a las consabidas dificultades que el mundo cultural viene soportando año tras año de manera sistemática.
Uno de esos actores es la Asociación Valenciana de Escritores y Críticos Literarios (CLAVE), presidida por Juan Luis Bedins, ente que sin gozar a día de hoy de ninguna subvención permanece activo y está intentado entregar sus señeros Premios de la Crítica (teatro, narrativa, poesía y ensayo), cuya ceremonia de entrega de premios permanece aplazada desde el año 2020 y ya tiene abierta su nueva convocatoria. Otro de esos valerosos actores es la editorial Olé Libros, dirigida por Antonio Alcolea, la cual ha soportado —como tantas otras— la cancelación de presentaciones, ferias y demás eventos de promoción, pero no ha renunciado a publicar en 2020 —y lo sigue haciendo en este 2021— grandes obras de autores consagrados y emergentes.
Y quiero cerrar esta columna con la mención del heroico nacimiento de una revista cultural (diciembre de 2020) en papel y digital, surgida en el seno del estudiantado de la Universidad de Valencia, me refiero a Parnaso, iniciativa de Carla Juárez (directora) y Blanca Lirio (subdirectora), almas de un proyecto independiente y riguroso, con vocación de permanencia, que abarca numerosas y diferentes disciplinas. El futuro es más que nunca incierto, pero es hora de apoyar iniciativas que nos hacen crecer como sociedad. Bravo por estos actores culturales valencianos que nos enseñan con su ejemplo que las cosas pueden hacerse de muchas maneras. Es un orgullo saber y divulgar que la cultura valenciana no se rinde.
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