Ayuntamiento de Gandía. /EPDA El ayuntamiento valenciano de Gandia acumula ya una deuda sobre ingresos corrientes del 285 % y se encuentra por ello en situación de riesgo alto, según ha alertado este viernes la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF).
Por su parte, el consistorio de Alboraya está en riesgo moderado o bajo, según recoge la AIReF en su "Informe sobre la ejecución presupuestaria, deuda pública y regla de gasto de 2022 en las administraciones públicas".
En ese informe, la AIReF mantiene la calificación de riesgo de sostenibilidad de todas las entidades con problemas. Las tres localidades en situación crítica son la madrileña Parla, con una deuda sobre ingresos corrientes del 1.050 %, seguida de la gaditana Jerez de la Frontera (499 %) y de Jaén (453 %).
Les siguen con un riesgo muy alto Los Barrios (Cádiz) (689 %), y los ayuntamientos madrileños de Navalcarnero
(393 %) y San Fernando de Henares (140 %).
En riesgo alto están las corporaciones de Alcorcón (Madrid) (88 %); Algeciras (Cádiz) (195 %); Gandia (Valencia) (285 %); la Línea de la Concepción (Cádiz) (217 %); Los Palacios y Villafranca (Sevilla) (152 %); Totana (Murcia) (344 %) y Barbate, que incumple nuevamente su deber de colaboración.
En riesgo moderado y bajo están: Aranjuez (Madrid); Arcos de la Frontera (Cádiz); Arganda del Rey (Madrid); Ayamonte (Huelva); Alboraya (Valencia), Almonte (Huelva); Caravaca de la Cruz (Murcia); Puerto Real (Cádiz), y San Andrés del Rabanedo (León).
Salen del análisis de riesgos de sostenibilidad de medio plazo los ayuntamientos de Arroyomolinos (Madrid) y Lepe (Huelva).
La deuda no es el único parámetro recogido por la AIReF para determinar el riesgo de sostenibilidad, ya que también analiza el periodo medio de pago, el saldo de operaciones corrientes sobre ingresos corrientes y la capacidad de financiación sobre ingresos corrientes.
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