La Diputación de Valencia ha logrado ahorrar más de 533.000 euros
en los últimos cuatro años en el consumo de energía eléctrica gracias a
las acciones emprendidas a través del plan de ahorro energético
diseñado por el Área de Administración General, que dirige la diputada
Carlota Navarro.
El plan de ahorro empezó a desarrollarse en 2009 con el objetivo de
reducir tanto el consumo energético como el coste de la energía en todos
los edificios de la corporación provincial, para lograr finalmente una
importante disminución del importe de la factura eléctrica de la
Diputación, que en 2013 ya se tradujo en una rebaja del 23% del consumo y
del 32% del gasto en este ámbito.
La diputada responsable del área gestora de este programa, Carlota
Navarro, ha destacado que “ha sido una labor coordinada desde el
Servicio de Mantenimiento y Proyectos Específicos -a los que desde aquí
les doy las gracias- en la que se han unificado criterios técnicos, como
cambio de luminarias, sistemas presenciales, instalaciones de aire
acondicionado (que suponen el 70% del consumo en una administración) y,
acoplándonos a los horarios del personal de la casa, también se han
ajustado los horarios de consumo”.
Además, la diputada ha insistido en la colaboración de todos y cada
uno de los trabajadores de la institución, que ha posibilitado “un
cambio en las costumbres como apagar el ordenador del puesto de trabajo
cada vez que se abandona, algo que supone un ahorro que se empezó a
generar desde la primera actuación en 2009 y que todavía hoy va en
aumento”.
“Con todas estas modificaciones, asimismo, se mejoran las condiciones
de todos los puestos de trabajo de la institución, tanto en los que ya
se ha actuado como en los que próximamente se actuará”, ha agregado.
Ahorro pese a la subida de costes
La corporación provincial comenzó a tomar datos de consumos
eléctricos y gasto económico en el año 2009 con el fin de establecer el
punto de partida y a realizar, de forma paralela, estudios de eficiencia
energética en las instalaciones de la Diputación con los que fijar las
medidas de ahorro a implantar durante 2010, que se centraron en la
reducción de la potencia contratada y la modificación del tipo de
contrato para bajar el precio de la energía.
Al año siguiente se pusieron en marcha las acciones de mejora y
comenzó el control y seguimiento diario de los consumos, a través de los
dispositivos y medios de gestión, además de continuar con la
realización de estudios de eficiencia.
Este mismo año, gracias al cambio del tipo de contrato y ajuste de
potencias contratadas, la Diputación obtuvo un ahorro inicial de 305.753
euros, que en julio logró incluso absorber el incremento del IVA del 16
al 18%.
Los años 2011 y 2012 también continuaron registrando ahorros de
hasta 210.934 euros en el último ejercicio, a la vez que la corporación
siguió implantando más medidas de mejora y control de consumos, lo que
dio como resultado, a pesar de las subidas del IVA, de las tarifas de
acceso por parte del Estado y del precio de la energía, un ahorro de
23.556 euros en 2013.
Todo ello condujo a una mejora de las condiciones energéticas y
económicas en este aspecto, que se enmarcan en las directrices
generales, que sigue la Diputación en los últimos años de control
estricto del gasto para revertir el ahorro en beneficio de los
municipios de la provincia de Valencia, a través de los planes y
diversas iniciativas de inversión.
El mismo coste pese al aumento de precios
“A efectos de control de la gestión, un parámetro importante a tener
en cuenta es que la partida correspondiente al consumo de energía
eléctrica no ha sufrido modificaciones al alza en todo este periodo,
sino que se ha podido mantener y reducir a pesar del incremento de los
costes derivados de las subidas de impuestos directos e indirectos, ya
que esas modificaciones han sido absorbidas en la propia partida”, ha
explicado la diputada.
“Son una preferencia del presidente de la Diputación de Valencia
todas las medidas de eficiencia energética que producen un ahorro
económico y quiere que la institución sea un ejemplo de ahorro, gestión y
eficiencia”.
“Por todo ello, continuaremos con las pequeñas inversiones que
generen mejoras en las tres líneas: ahorro de consumo, disminución del
gasto y mejora de las condiciones de los puestos de trabajo”, ha
concluido la diputada.