El
Ayuntamiento de Sagunto ha intensificado la vigilancia que los
efectivos de la Guardia Rural ejercen en las zonas de las
urbanizaciones de montaña, con el fin de evitar los vertidos
ilegales en los contenedores. Además, en estos momentos, ya se están
aplicando las sanciones estipuladas por la Ordenanza de Convivencia,
que oscilan entre los 50 y los 499 euros.
Cabe recordar que el Consell Agrari denunció recientemente que, con la llegada de
la temporada estival, se estaban depositando tanto restos de poda
como enseres domésticos, escombros, electrodomésticos, muebles o
colchones en los contenedores de parajes como Pere Gil o Pla del Bou.
Como ya informamos, esta actividad está totalmente prohibida y
supone también un grave problema, ya que puede ocasionar un riesgo
de incendio forestal, así como la mala imagen en la zona y un coste
añadido para el Ayuntamiento, que debe recoger, transportar y
reciclar los desechos.
En
este sentido, el consistorio ha procedido en los últimos días a la
limpieza de los enseres y restos de poda depositados en zonas no
aptas, de forma que en estos momentos están completamente vacías.
Según precisaba el Presidente del Consell Agrari, Joaquín Catalán,
“para esta labor se ha necesitado
contratar los servicios externos de una pala y camiones, con el
importante gasto que esto conlleva para el Ayuntamiento”. El
edil también añadía que “todo
esfuerzo es poco para evitar que algunos ciudadanos ensucien y pongan
en peligro de incendio la zona”.
Cabe
destacar que en las zonas donde están situados los contenedores se
han colocado carteles recordando la prohibición y que estos enseres,
así como los restos de poda pueden verterse de forma legal en el
Ecoparque, que está situado en el polígono Sepes y gestionado por
la SAG.
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