La
muestra que actualmente se exhibe en la sala Lametro de la estación
de Colón de Metrovalencia iniciará en esta localidad su itinerancia
por los municipios por los que discurre esta línea. La exposición
permanecerá en Valencia hasta el próximo 29 de noviembre, de lunes
a viernes y de 10 a 14 horas y de 17 a 20 horas.
Esta
exposición, organizada por FGV en colaboración con Vossloh, realiza
un recorrido por los 125 años de historia a través de documentos
originales, planos, fotografías, proyectos, relojes, campanas,
centralitas, billetes y aparatología ferroviaria del conocido
"trenet".
Lametro
acoge una treintena de piezas y mobiliario original ferroviario
perteneciente al fondo patrimonial de FGV, y cerca de cuarenta
documentos, planos y proyectos del Archivo Histórico de FGV, así
como más de noventa fotografías sobre estaciones, paisajes,
viajeros, trenes y locomotoras del "Trenet del Túria".
Además, se presenta una selección de fotografías sobre los trenes
que han circulado en esta línea, pertenecientes a la colección del
fotógrafo amateur Enrique Andrés Gramage, quien posee más de
16.000 instantáneas propias.
Con
la finalidad de promocionar esta muestra entre los viajeros y dar a
conocer uno de los trenes que circuló en esta línea hasta finales
de los años 80, FGV ha tematizado parte de una unidad de metro de
las que actualmente presta servicio entre Valencia y LLíria con la
imagen de un tren "portugués". Estos trenes
característicos por su color verde se incorporaron al servicio a
finales de los años 40 y dejaron de funcionar en 1987.
Su
nombre tiene su origen al haber sido adquiridos estos trenes a los
Ferrocarriles Portugueses. A cambio de 12 millones de escudos se
incorporaron al servicio seis automotores eléctricos para viajeros,
veinticuatro remolques, dos furgones automotores y doce motores
Siemens para recambio. Estos trenes prestaron servicio en las Líneas
en dirección a Llíria, Grao, Bétera y Rafelbunyol.
En
1888 fue abierta al público la línea de Llíria, con su primigenia
estación de Valencia ubicada en Marxalenes, que posteriormente se
trasladó a Pont de Fusta. A principios del siglo XX, este nudo
ferroviario, así como otros que partían desde Valencia, gestionados
por la Compañía de Tranvías y Ferrocarriles de Valencia (CTFV)
experimenta un periodo de plenitud.
En
la línea de Llíria se abren nuevos apeaderos para los veraneantes,
como el de La Canyada, se construye la doble vía hasta Empalme
(1922) y la electrificación de la línea fue el acontecimiento más
innovador del momento (1926). Una época de modernidad que quedó
reflejada en un gran hito artístico y arquitectónico: el nuevo
edificio para Campamento de Paterna.
La
década de los años treinta también significó una difícil etapa
para el "trenet". El autobús comenzaba a mostrarse como
una dura competencia, a lo que se añadieron las huelgas, los
conflictos del año 1934 y la creación de la Sociedad General de
Autobuses en 1935. Iniciada la Guerra Civil, las líneas pasaron a
ser gestionadas por un comité obrero, las infraestructuras sufrieron
un importante deterioro y el material móvil un significativo
desgaste.
Finalizada
la contienda, la CTFV vuelve a hacerse cargo de sus explotaciones. Se
promueve la construcción de nuevas paradas y la doble vía llega a
Paterna (1947). También cabe destacar la puesta en marcha de los
trolebuses, del nuevo material móvil o propuestas tan innovadoras
como el proyecto del Metropolitano de Valencia.
A
mediados de 1950 comenzó el declive del servicio, no pudiendo
competir con el fuerte desarrollo del transporte por carretera. Su
red ofrecía un servicio insuficiente y la riada de 1957 afectó
duramente al material móvil e infraestructuras.
En
1964 la CTFV hizo entrega de todas sus líneas a la Explotación de
Ferrocarriles por el Estado. Un año más tarde FEVE se hizo cargo
definitivamente de todas ellas, dedicándose al mantenimiento y
mejora de una serie de ferrocarriles que se consideraban
imprescindibles para el transporte público valenciano.
El
10 de noviembre de 1986 se constituye Ferrocarrils de la Generalitat
Valenciana, empresa de derecho público a la que se le transfieren
los servicios ferroviarios hasta entonces explotados por FEVE. Se
inicia así la renovación integral de la red valenciana. Progreso y
modernidad que se materializan con la apertura en 1988 del primer
tramo subterráneo. Es el eje vertebrador donde se originó la actual
red del metro de Valencia, que celebra su 25 aniversario, en un
continuo proceso de crecimiento y expansión, con la mejora de sus
instalaciones y servicios.