La nueva instrucción sobre vías pecuarias garantiza su preservación al tiempo que simplifica procedimientos urbanísticos

“A través de la nueva instrucción sobre vías pecuarias de la Generalitat se garantiza la preservación de estos antiguos caminos ganaderos al tiempo que simplificamos determinados procedimientos urbanísticos”, ha destacado la consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, en la presentación de la misma en Castellón.

“Y es que, ahora, se contempla la posibilidad de variar o desviar el trazado de una vía pecuaria por ordenación territorial pero el procedimiento se desarrollará simultáneamente al trámite urbanístico y éste sólo se aprobará si el informe de vías pecuarias es positivo. Mientras que, hasta la fecha, la duración de este cambio era indefinido”, ha explicado Bonig.

“Ahora bien, -ha continuado la consellera- esta modificación debe estar plenamente justificada y en el caso de que, al final se tenga que modificar, se garantizará que no se pierde ni un m2 de vía pecuaria y que todo el nuevo trazado sea practicable”.

No sólo se adquieren los nuevos terrenos a nombre de la Generalitat, sino que se incluyen en el catastro o registro y se garantizan los usos para los que están concebidos, tanto el ganadero como el recreativo y medioambiental

“De esta manera cumplimos un doble objetivo, preservar este importante patrimonio y al mismo tiempo se da un impulso a los procedimientos urbanísticos que fomentan el empleo en el municipio en el que se desarrollen y por tanto la actividad económica”, ha destacado la consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente.

Simplificación de trámites y ahorro de 150.000 euros

“Además –ha continuado la consellera- otro de los objetivos principales de esta nueva instrucción es la reducción de los trámites burocráticos y los plazos relacionados con las vías pecuarias, así como establecer un criterio en esta materia que sirva como herramienta de trabajo para solventar la problemática que generan las mismas a la hora de llevar a la práctica determinadas actuaciones”.

Hasta el momento, la gestión de las vías pecuarias se basaba en cuatro directrices distintas lo que resulta poco eficaz y eficiente ya que supone una mayor duración de los procedimientos administrativos y su consiguiente coste económico.

A partir de ahora, se regirá por una única instrucción que supone una importante reducción de trámites y además un ahorro estimado de 150.000 euros anuales.

Asimismo, a través de esta única normativa se unifican los criterios para resolver los expedientes relacionados con las vías pecuarias, concretamente se regulan los procedimientos de clasificación, deslinde, amojonamiento, desafectación, así como la modificación de trazado por ordenación territorial, de autorización de ocupación temporal, así como de concesión demanial.

En todos ellos se logra una reducción del tiempo de tramitación. En el caso de la revisión y actualización de las vías se podrá reducir de dos años a nueve meses, para la desafectación de las vías pasará de tres años a un año; mientras que el procedimiento de autorización de ocupación temporal la tramitación durará alrededor de 6 meses frente al año actual.

Además, por primera vez, en materia de vías pecuarias, se contempla la concesión demanial para los supuestos de transporte energético de interés público que afecte a una vía pecuaria como las infraestructuras eléctricas, hidráulicas, de telecomunicaciones o gaseoductos y la tramitación no superará los seis meses.

Priorizar la clasificación

Bonig ha remarcado que “hasta la entrada en vigor de esta instrucción, los procedimientos sobre vías pecuarias se eternizaban por culpa de una tramitación farragosa y lenta y en la que, se primaba el deslinde de la vía frente a la clasificación”.

“A partir de este momento, es la clasificación, es decir, determinar la existencia, anchura, trazado y demás características físicas de cada vía pecuaria la que prevalecerá ante el deslinde que supone un procedimiento mucho más costoso en el tiempo”, ha asegurado la consellera.

La Comunitat Valenciana cuenta con cerca de 16.000 kilómetros de vías pecuarias, de los que casi el 50% de las mismas, se encuentran en la provincia de Castellón. En esta provincia se encuentran catalogadas más de 2.200 vías pecuarias que suman alrededor de 8.000 kilómetros”.