La CEO de Tucuvi, MarÃa González. EFE/Ana Escobar./ EPDAOfrecer seguimiento continuo a personas mayores y enfermos crónicos solo con llamadas de teléfono automáticas y personalizadas es lo que ofrece LOLA, una voz virtual que interroga a los pacientes en función de su dolencia, cataloga la información y la transmite en tiempo real al médico.
Con Inteligencia Artificial y tecnologÃa de voz, este asistente virtual no necesita dispositivos, instalación, aplicaciones ni wifi, solo "descolgar el teléfono -fijo o móvil- y hablar", cuenta a EFE MarÃa González, cofundadora de la empresa Tucuvi que lo creó y que actualmente está en la aceleradora valenciana Lanzadera.
"¿Qué tal estás?" o "¿Te has tomado la medicación?" son algunas de las preguntas de LOLA para detectar necesidades por covid-19, problemas respiratorios o insuficiencia cardÃaca en los pacientes atendidos -más de 14.500 en toda España- y cuyas respuestas analiza, cataloga y envÃa a los profesionales.
PERSONAS MAYORES-DISPOSITIVOS: UN BINOMIO CONTRAPRODUCENTE
Esta ingeniera biomédica de 25 años y natural de Segovia trabajaba en una multinacional de dispositivos médicos; cuando visitaba hospitales para conocer cómo se formaba a médicos y pacientes en su uso advirtió que no estaban incluidas las personas mayores, a quienes más podÃan beneficiar estos sistemas.
Según los médicos, si ellos necesitaban dos semanas de formación, "cómo iba a usarlo una mujer de 90 años que utilizaba el móvil para lo justo; es contraproducente", explica para lamentar que la "culpa" era de las empresas: "Estábamos creando y diseñando soluciones que no están adaptadas para quienes deberÃan beneficiar".
EL BOTÓN ROJO, ¿ÚNICA SOLUCIÓN?
Entonces empezó a investigar qué habÃa en el mercado de tecnologÃa para mejorar la salud y la calidad de vida de las personas mayores: "Lo más extendido era el tÃpico botón rojo de teleasistencia para pedir ayuda, pero los mayores lo apretaban mucho por equivocación y en vez de estar más tranquilos, ocurrÃa al contrario".
Ella y su socio, Marcos Rubio, que desarrolla software de inteligencia artificial para empresas emergentes, no entendÃan que con el "potencial" de la tecnologÃa en la medicina, "todo lo que tuviera la gente mayor fuera solo un botón rojo".
Empezaron a "trastear" con relojes con sensores pero habÃa "muchos falsos positivos" y muchos mayores "no habÃan llevado reloj nunca y no se lo querÃan poner".
A los médicos les "daba igual" que sus pacientes de 80 o 90 años y con varias enfermedades crónicas tuvieran la tensión un poco más alta o más baja "o que hayan dado mil pasos al dÃa".
MEJORAR LA COMUNICACIÓN MÉDICO-MAYORES
Lo que querÃan era "saber cómo se encuentran y si les pueden ayudar en algo", y los mayores "poder expresarse y que su médico les escuchase", apunta para defender: "Lo que habÃa que mejorar era la comunicación del médico con la persona mayor".
Fue cuando empezaron a trabajar con los altavoces inteligentes Alexa y el asistente de Google; descubrieron "que ese era el canal para comunicarse mejor porque era fácil: solo tenÃan que hablar".
"Pero para usarlo necesitas conexión de internet, un teléfono inteligente y despertar al dispositivo", detalla, y además, la regulación les "restringÃa" poder conectar con sistemas médicos.
EL NACIMIENTO DE LOLA
"La tecnologÃa de voz era el canal para mejorar la comunicación y hacer los cuidados escalables, pero tenÃamos que buscar algo que ya estuviera en todas las casas y no hubiera que hacer nada ni necesite internet ni smartphone y se pueda integrar con todo, y llegó LOLA, un cuidador virtual que habla por teléfono", explica.
Llama pero también le pueden llamar y llega a cualquier sitio porque "hasta en el pueblo más pequeño de Albacete, la abuela más mayor tiene un teléfono fijo en casa", pone como ejemplo, e indica: "Necesitamos solo un número al que llamar".
PIVOTAR CON LA PANDEMIA
Entrenaron a LOLA para atender varias dolencias pero a raÃz de la pandemia del coronavirus, "la prioridad máxima eran llamadas de seguimiento de sÃntomas de covid y necesidades por el confinamiento, porque habÃa miles de mayores que se quedaron sin atención a domicilio y algunos necesitaban ayuda para limpiar las ventanas, pero otros para levantarse".
Ahora LOLA interroga sobre covid-19, insuficiencia cardÃaca, enfermedades pulmonares (EPOC), estimulación cognitiva, recordatorio de toma de medicación y citas y evaluación de la calidad de los cuidados a domicilio.
SUS CLIENTES Y SU PROYECCIÓN
Tucuvi trabaja en el sector clÃnico, con hospitales, aseguradoras médicas, farmacéuticas y asociaciones de pacientes; y el sociosanitario, con empresas de ayuda a domicilio, teleasistencia y seguros de vida y hogar.
Los profesionales tienen que activar el módulo de cada paciente y las horas a las que LOLA tiene que hacer la llamada; el dispositivo les devuelve la información analizada y básica, "aunque la persona hable más de dos minutos", explica González, que asegura que el 20 % de las llamadas necesita la intervención del profesional.
Actualmente tiene acuerdos de colaboración con el grupo Ribera Salud y la farmacéutica Janssen de la empresa Johnson&Jonhson, y está activa en Madrid y Albacete aunque su objetivo es estar implantado en toda España a finales de 2021.
Creada en septiembre de 2019, ese año se dedicó al desarrollo de producto, aunque en 2020 confÃa en facturar entre 70.000 y 80.000 euros y, "como mÃnimo", doblar la cifra el año que viene.