Agentes de la Policía Local realizan un control en la salida hacia Madrid el pasado viernes. EFE Las grandes ciudades de la Comunitat Valenciana afrontan desde este viernes su tercer fin de semana de cierre perimetral, de manera que entre las tres de la tarde del viernes y las seis de la mañana del lunes no se podrá entrar ni salir de ellas salvo para lo estrictamente indispensable.
Esta medida, adoptada para intentar frenar el avance de la pandemia de coronavirus, se viene aplicando en las dieciséis ciudades de más de 50.000 habitantes de la Comunitat desde el último fin de semana de enero, y afecta al 46 % de la población de la región.
El cierre perimetral de fin de semana se aplica a la nueve grandes ciudades de la provincia de Alicante (Alicante, Alcoi, Benidorm, Elche, Elda, Orihuela, Petrer, San Vicent del Raspeig y Torrevieja), las cinco de Valencia (València, Torrent, Sagunto, Gandia y Paterna) y las dos de Castellón (Castelló y Vila-real).
Durante las 63 horas que transcurren entre las tres de la tarde del viernes y las seis de la mañana del lunes, solo está permitida la entrada o la salida de estas ciudades por causas justificadas, como el retorno a la residencia habitual, la asistencia a centros sanitarios o al lugar de trabajo, o el cuidado de personas vulnerables.
Aunque en principio se trata de una medida cuya vigencia finalizaba el próximo lunes, la Interdepartamental de la Generalitat que se reúne esta tarde previsiblemente la ampliará dos semanas más, ya que el president del Consell, Ximo Puig, ha afirmado que no es momento aún de relajar las restricciones.
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