¿Le molestamos, señor Cano?

En el pleno de abril el concejal de Comercio de Benetússer volvió a demostrar su “mejor talante” llamándome “listo”, preguntándome si era feliz o incluso pidiendo al grupo municipal del Partido Popular que “como mínimo, no molestemos”. Algo que no nos sorprende pues no es la primera vez que el señor Emilio Cano se dirige a nosotros en estos términos. 

Y es que al señor Cano le molestamos. Le molesta que le preguntemos por el fraccionamiento de facturas de la FAC de 2024 para saltarse la ley de contratos del sector público; le molesta que le reprochemos la agilidad (27 días) con la que se ha licitado el contrato de la feria de este año mientras se tarda más de cinco meses en repartir las ayudas de la Fundación Amancio Ortega; le molesta que le digamos que la FAC está obsoleta; le molesta que le insinuemos que, tal vez, los más de 50.000€ que le va a costar al pueblo “su feria” podría dedicarlo a ejecutar acciones que beneficien realmente a un mayor número de autónomos y emprendedores que aún no pueden levantar su persiana; le molesta que tengamos más iniciativas que él en materia de promoción económica y dinamización comercial; le molesta tener que elegir nuestras propuestas e ideas para “su feria”… En fin, le molesta todo.

Y cuando al señor Cano le molesta todo, solo le queda el insulto, el ataque personal y las faltas de respeto. ¡Al más puro “estilo Cano”!. 

Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Desde el Partido Popular de Benetússer criticamos que la FAC debe someterse a una revisión profunda con propuestas nuevas y diferentes ya que después de 15 ediciones es un modelo de acción que no repercute en nuestro comercio local. Además, en el delicado momento que atraviesan nuestros autónomos, emprendedores y empresarios quizás no sea la mejor opción para ayudarlos cuando, muchos de ellos, todavía no saben si podrán reiniciar su actividad.

La percepción de nuestro entramado comercial es muy distinta a la del concejal de Comercio: las indemnizaciones del Consorcio no están llegando y las ayudas estatales brillan por su ausencia. Sin embargo, desde el área de promoción económica se vuelven a repetir fórmulas caducas en vez de apostar por un plan de dinamización comercial que reactive el consumo y favorezca la recuperación económica de nuestros autónomos. Pero cuando se carece de iniciativas, pasan estas cosas. 

Señor Cano, en vez de acudir al insulto fácil y a la soberbia, siéntese, escuche a sus vecinos y haga algo para que no se le recuerde como el concejal que abandonó a sus comerciantes y autónomos en el momento que más le necesitaban. ¡Y listo!