Los carriles bici de l'Horta, llenos de puntos negros

Dar un paseo en bici por los carriles bici habilitados en la comarca de L’Horta Nord puede convertirse en una odisea. Y es que la escasa señalización, caminos que terminan sin ningún sentido, vías sin conexión y la falta de preferencia de los ciclistas suponen importantes obstáculos para la circulación de este medio de transporte ecológico.

Así lo han denunciado miembros de la asocación Acció Ecologista Agró, que a través de su colectivo Valencia en Bici, han criticado estas deficiencias en la red de carriles bici de L’Horta Nord.

Uno de los ejemplos de esta situación, según narra Miquel Crespo de la asociación ecologista, es la Vía Xu¬rra que enlaza la ciudad de Valencia con todos los mu¬nicipios de L’Horta Nord. En sus aproximadamente 20 kilómetros de longitud, esta vía presenta graves deficiencias. “Cuando llegas a Meliana y llegas a la rotonda de salida de este municipio, te encuentras con que el carril bici ha desparecido y no está bien señalizado por dónde tienes que seguir. Y si no llevas guía o vas con alguien que conozca el camino sigues recto en con-tradirección con los coches de la carretera”, explica Crespo.

En la misma situación se encuentra el carril bici que une la Pobla de Farnals con Rafelbunyol. “Todo el primer tramo está bien señalizado y de repente desaparece y te quedas en contradirección a los coches que pasan por la carretera”, detalla otro de los afectados.

En el municipio de Alboraia también se han registrado anomalías en la red viaria de los carriles bici. Según los representantes de Agró en L’Horta Nord, “existen un par de pasos que tienes que hacerlos con extremada precaución debido a la gran in¬tensidad de tráfico. Te ves obligado a parar y tomártelo con calma”.

En este sentido, los afectados recuerdan que el ciclista posee una serie de derechos y que tienen preferencia en los carriles bici respecto a los vehículos motorizados. “Algo que hoy por hoy muchas veces se olvida”, lamentan.

Por ello, el colectivo reclama a los municipios afectados la elaboración de un plan conjunto que sirva para conectar todos los tramos existentes y corregir todas las deficiencias, con el objetivo de favorecer más el uso de este medio de transporte ecológico. De hecho, tal y como afirman desde el colectivo en defensa de este medio de transporte, son muchos los usuarios que cada día utilizan la red de carril bici de L’Horta.

Los municipios ofrecen el préstamo de bicicletas

Los Ayuntamientos de los municipios de L’Horta también ponen su granito de arena para impulsar la utilización de la bicicleta como medio de transporte. De hecho, en la actualidad once localidades de las comarcas de L’Horta Nord y Sud ya ofrecen el préstamo de bicicletas.

Algunos ejemplos son Paterna, Burjassot, Alaquàs, Aldaia, Xirivella, Quart de Poblet, Torrent, Godella, Manises, Mislata y Moncada, donde hace pocoinauguraron este nuevo servicio ecológico impulsado por la Conselleria de Infraestructuras y Transporte.

Y que el Consell, a través de la Agencia Valenciana de la Energía (AVEN), ha sufragado la instalación de servicios gratuitos de préstamo de bicicletas en varios municipios valencianos.

Esta iniciativa se enmarca dentro del programa ´Ahorra con Energía´ de la Conselleria de Infraestructuras y Transporte, cuyo objetivo es lograr un mejor uso de los recursos energéticos en los diferentes sectores de la sociedad valenciana.

Los servicios son gratuitos o con el pago de una cantidad “simbólica”. Además, los Con-sistorios tienen la obligación de mantener el servicio un mínimo de tres años en funcionamiento. La Agencia Valenciana de la Energía se hace cargo del 100% del coste de la implantación del servicio.

Las bicicletas llevan incorporado un sistema de control mediante tarjeta electrónica o sms -según el municipio- que permitirá el acceso a la bicicleta y su devolución y, al mismo tiempo, permitirá una gestión del sistema desde un centro de control del Ayuntamiento.

El tiempo de préstamo lo establece el propio Ayuntamiento pero estará en torno a los dos o tres horas porque lo que se pretende es que sirva como alternativa de desplazamiento al vehículo privado.

Según las estimaciones de la AVEN, con la utilización de este servicio, los municipios implicados dejarán de consumir 825.000 litros de gasolina al año y gracias a esta reducción del consumo de combustible, dejarán de emitir 2.000 toneladas de CO2 a la atmósfera cada año.

El objetivo es animar y facilitar a los ciudadanos la utilización de la bicicleta como una alternativa limpia y saludable a las necesidades de movilidad por la ciudad, con la consiguiente reducción del consumo energético asociado al transporte urbano.