Miguel Á. Martín Hablar, analizar, justificar,
recomendar, son verbos que suelen utilizarse tras la celebración de
cualquier cita electoral. Estábamos mas acostumbrados a las
justificaciones a nivel estatal, pero llevamos un par de semanas
asistiendo a un espectáculo mediático y calculado a escala local.
Lo destacable de todo este proceso y en mi modesta opinión, es la
diferencia que separa a los diferentes partidos políticos en dos
grandes grupos: los que se han dado cuenta de que los tiempos están
cambiando, que diría Bob Dylan, y que lo está haciendo sin
remisión, que diría Loquillo y Los Trogloditas (esto en
clave-cuarentones).
Las urnas han hablado y han dejado
claro que la ciudadanía está en otra cosa, está muy quemada,
porque su vida ha empeorado en estos últimos años, y quiere
mejorar. Quiere que la política sea otra cosa. Los y las votantes
han premiado a los partidos que hace tiempo que iniciaron su
transformación, o incluso a los que han aparecido en los últimos
tiempos y que reclaman que la política sea diferente.
Contar votos tras unas elecciones,
sumando, restando, sacando porcentajes con una tabla de Excel y
rescatando de los cajones conceptos como “voto rural” en esta
ciudad es cuanto menos un deporte de riesgo. El pueblo ha hablado,
además de manera sabia. Como decía, la gente está en otra cosa,
lejos de frentismos. Compromís ha sido el partido más votado, entre
otras cosas porque ya no es el Bloc, es otra cosa. Y la mayoría del
electorado así lo ha interpretado. En el caso de IP, que también
inició su renovación hace tiempo, pasando de Segregación a
Iniciativa Porteña, argumentar como superioridad que se es el
partido más votado en Puerto tiene sus riesgos. Se podría
argumentar desde otro punto de vista que sus resultados (4.014 votos)
quedan lejos del 51% de votos del Puerto (20.038 votos). En todo
caso, creo que su papel es muy importante si son fieles a su nuevo
nombre, sin duda su aportación será mucho más útil para la gente
de Puerto; ADN Morvedre sigue siento una promesa de futuro y una gran
incógnita de presente; PSOE y PP han aparecido como dos partidos
viejos y exhaustos.
El PSOE está claro que ha pagado sus
“maniobras orquestales en la oscuridad preelectorales”, y el PP
no ha sabido sacar provecho de haber sido el partido que ha tenido la
suerte de tener la mayor capacidad de inversión de la historia de
esta ciudad y un programa de gobiernos que le dejó hecho el
“tripartito”, como ellos llaman con desdén en 2003; C´s, ha
respondido a las expectativas creadas, y parece haber recogido lo
perdido por el Partido Popular; EU, con su “lifting” ha recogido
mucho voto joven y una parte del desencanto socialista, más una
parte del voto “Podemista” que no terminaba de identificarse con
la candidaturas de ADN, pero tiene el futuro complicado. En
definitiva, los tiempos ya han cambiado, ahora hay que ver si la
política se ha dado cuenta y lo ha entendido. Al tiempo.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia