Ante el anuncio realizado por
Lafarge sobre la paralización temporal del expediente de ampliación
de la cantera del Salt del Llop sobre la zona de Las Margas y de la
paralización de unas supuestas inversiones que iba a realizar
Lafarge, desde la Asociación de Vecinos Bonilles-Romeu y Tres Barrancs "pensamos que
todo se trata de una gran farsa y una estrategia de la empresa para
cerrar la fábrica sacando algún tipo de beneficio económico, y
dejar tirados a sus trabajadores".
"Por un lado creemos que la
paralización temporal del expediente de ampliación de la cantera se
debe a que Lafarge es consciente que dicha ampliación es ilegal, y
que el resultado de dicho expediente va a ser desfavorable a la
ampliación, y por ello no le interesa acumular otra resolución
desfavorable a la ampliación, como la denegación de la Declaración
de Interés Comunitario (DIC) de 2010 posteriormente ratificada por
sentencia del TSJCV en 2015, a la hora de presionar al Ayuntamiento
de Sagunto para intentar sacar alguna compensación económica", explican.
Por otro lado, "el director de
Lafarge ha dicho pública y reiteradamente que no va a negociar el
convenio firmado en 2013, y tampoco está buscando alternativas
viables y legales y aceptables desde el punto de vista ambiental y
social. Entre estas alternativas extractivas se encuentran la cantera
del Salt del Cavall entre Vall d’Uxó y Almenara propiedad de
Lafarge, la cantera abandonada de Algímia, y la cantera de Holcim en
Jérica".
"Estos hechos nos hacen
reafirmarnos en que Lafarge lo que realmente pretende es finalizar su
actividad en el municipio, cerrando la fábrica y culpando de ello al Ayuntamiento para irse de rositas y con su imagen corporativa limpia,
pero con los bolsillos llenos a costa de alguna compensación
económica y del despido de sus trabajadores. La negativa a buscar
alternativas extractivas por parte de Lafarge, el contexto de la
fusión entre Lafarge y Holcim, la crisis y concentración del sector
cementero, y el hecho de estar amortizada la fábrica del Puerto de
Sagunto refuerzan nuestras sospechas sobre las intenciones de
Lafarge".
"Los vecinos que vivimos en la
zona de Bonilles-Romeu y Tres Barrancs, y que sufrimos desde hace
décadas las molestias y riesgos de tener una cantera tan cerca de
nuestras viviendas (explosiones, polvo, daños en nuestras casas,
vibraciones, etc...) no tenemos alternativas, la montaña de Romeu
tampoco. Montaña de Romeu sólo hay una, y es el pulmón verde del
municipio, lugares viables con menos valor y menos conflictivos para
extraer caliza por parte de Lafarge hay muchos, pero Lafarge no tiene
ninguna voluntad de conciliar intereses y mantener sus puestos de
trabajo, sino que únicamente busca mantener los máximos beneficios
económicos de los accionistas de Lafarge-Holcim".
Por todo ello, los vecinos "seguiremos defendiendo nuestros derechos, nuestra dignidad, el
patrimonio público natural, y el cumplimiento de la legalidad cómo
hemos hecho hasta el momento, y continuaremos acudiendo a la justicia
en caso de que se intentara ampliar o prorrogar la actividad de la
cantera del Salt del Llop más allá de la concesión legal vigente
que finaliza en 2017".
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