Más de 1.500 personas se acercan al Festival Internacional de Música de Cambra de Godella

Godella ha estado invadida durante una semana por genios de la música. Foto: EPDA.

Talento, virtuosismo, precisión, técnica… Disponer de una de estas cualidades es casi sinónimo de éxito pero cuando una persona las reúne todas ellas, el resultado empieza a rozar la “genialidad”. Godella ha estado invadida durante una semana por genios de la música, auténticos gigantes de talla mundial que han enseñado, han compartido, han convivido y, sobre todo, han interpretado las más diversas piezas musicales con una exquisitez inédita, además de haber demostrado una humildad y una proximidad difícilmente imaginables. El III Festival Internacional de Música de Cambra se clausuró ayer con el concierto didáctico ofrecido por la violinista Tasmin Little, justo 8 días después de que otra violinista, Mirabai Weismehl, impartiera la primera sesión magistral a los alumnos de la Jove Orquestra de Godella y después de ver pasar por sus conciertos y sesiones a más de 1.500 personas.

Entretanto, los aplausos, las emociones y las sensaciones se apoderaron de la intensa rutina de este pueblo de la comarca valenciana de l’Horta. El Centro de Arte Villa Eugenia acogió gran parte de la actividad del Festival que arrancó con la sobrecogedora Suite Número 1 de Bach en las cuerdas del chelo de Lluís Claret. El pianista, Josep Maria Colom, Mirabai Weismehl, al violín i Joan Enric Lluna, con el clarinete cerraron el concierto inaugural con obras de Beethoven, César Frank y Robert Gerhard. Claret acercó un poco más las suites de Bach al público godellense, al día siguiente con una charla pedagógica que recorrió el origen del violonchelo, contextualizó la época que vivió el compositor y llegó hasta la música encontrada en youtube.

La espectacularidad arquitectónica de Villa Eugenia dejó paso a la bucólica y espiritual Ermita de Campolivar el día 21. Con una puesta en escena espectacular, Arensky, Crusell y Schubert fueron interpretados por los chelos Lluís Claret y Rafal Jeriezski, las violas Mirabai Weisnehl i Julia Hu y el clarinetista Joan Enric Lluna. Al finalizar, la organización ofreció una degustación de orchata para los asistentes y los músicos que compartieron una velada musical memorable.

En el ecuador del Festival,. Xavier Costa coordinó la charla-conferencia "Schubertades, l'esperit de la Música de Cambra" donde, junto al clarinetista y director del Festival, Joan Enric Lluna; la pianista Alba Ventura y el fagot, Higinio Arrue conversaron con medio centenar de vecinos interesados.

Tras casi una semana de ensayos, y master-class, había llegado el momento para que los alumnos de la Jove Orquestra de Godella i Música Cordis mostraran el resultado de esos días de trabajo. El Concerto nº2 de l'estro armonico para 2 violines de Vivaldi fue la obra elegida. La violinista del Palau de Les Arts, Mirabai Weismehl i Sarahi Sancho San Bartolomé actuaron de solistas, nuevamente en Villa Eugenia como escenario. Posteriormente, el Quinteto para viento y piano op.16 de Beethoven y las obras más irónicas y populares de Poulenc y Martinu, Trío para oboe, fagot y piano y La revue de cuisine cerraron la velada. El grupo Moonwinds, formado por Joan Enric Lluna, Cristina Gómez, Higinio Arrué i Javier García estuvo acompañado por la pianista Alba Ventura y el trompeta, Francisco Javier Barberá.

En la recta final, el contrabajo centenario de Toni García protagonizó el concierto didáctico de la tarde del lunes 25. Junto al clarinetista, Joan Enric Lluna i al pianista Nigel Clyton recorrieron vertiginosamente el Gran Duo de Bottessini. La sesión fue el preludio de una noche vibrante y emocionante. Además de la irónica obra de Bottessini en la que el contrabajo aspira a arrebatarle el protagonismo al clarinete, el Trío para clarinete, violín y piano de Katchaturian abrieron el telón de la velada. La violinista Tasmin Little continuó con dos piezas en solitario: La leyenda para violín, de Albéniz y la Balada para violín de Eugène Ysaye. Dos obras cargadas de dificultades técnicas i belleza interpretativa que hicieron ponerse en pie a un público entregado con la británica. Después del descanso, la propia Tasmin Little, Nigel Clayton, Toni García, Julia Hu i Rafal Jezierski cerraron los conciertos de esta tercera edición del Festival Internacional de Música de Cambra de Godella con el Quinteto “La Trucha”, de Schubert.

Tasmin Little puso el broche final con una última sesión didáctica, ayer martes 26 de julio, en Villa Eugenia. La Asociación ‘Amics de la Música de Cambra de Godella’ confirmó en el acto de clausura que ya está “trabajando para mantener el nivel o incluso superarlo, si es posible, en la próxima edición del Festival”.